TE281 - Tierras Agricultura

nº 281 64 REMOLACHA, UN CULTIVO CON FUTURO I JORNADA TÉCNICA ACOR también mantiene su voluntad de unificar estrategias con la empresa Azucarera, con el propósito de aplicar medidas conjuntas que refuercen la viabilidad del cultivo y racionalicen los procesos de trabajo de cada una de las dos empresas. En este sentido, se ha dado un primer paso en colaboración con el Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (Itacyl) para impulsar un protocolo de colaboración que permita coordinar actuaciones en las áreas de los medios de producción, genética, plagas y enfermedades, abonados, infraestructuras y tecnología, sostenibilidad y bioeconomía. Este trabajo conjunto permitirá emitir recomendaciones unificadas para orientar a los remolacheros de Castilla y León en la aplicación de las últimas innovaciones tecnológicas de una forma rápida y más eficiente. Para ello, se diseñará una plataforma de transferencia tecnológica que realizará de forma conjunta actividades de promoción y difusión de resultados que permitan poner estos a disposición del sector productor. También se ha planteado seguir explorando acuerdos de colaboración que permitan la entrega de la remolacha de una de las dos empresas en las fábricas de la otra: “Es un acuerdo que interesa para todos, aseguró el presidente Medrano, porque reduciría costes y haría que el proceso de producción fuera más racional y sostenible, evitando que “nos pasamos el día con el camión dando vueltas y contaminando”. VÍAS DE COLABORACIÓN CON AZUCARERA ACOR va a superar con creces el objetivo de llegar a una producción de 180.000 toneladas de azúcar gracias a la contratación de 14.116 hectáreas, lo que permite optimizar los costes y las inversiones realizadas. Y desde las administraciones se mantiene el apoyo al sector con las ayudas garantizadas hasta 2022. Con todo ello, Medrano cree que hay muchas razones para confiar en que la cooperativa entre nuevamente en la senda de los beneficios, que se revertirán al socio en forma de retorno económico. REDEFINICIÓN DE ÁREAS DE ACTIVIDAD Y DESINVERSIONES Las medidas para reforzar el futuro de ACOR no se van a quedar en esa recuperación de las bases del negocio azucarero propio. La Asamblea General ha autorizado al Consejo Rector para que inicien las gestiones que sean necesarias para deshacer o reconvertir algunas de las posiciones de negocio e inversiones existentes. Todos estos movimientos obedecen, según ha explicado el presidente Justino Medrano, a la necesidad de valorar las opciones para desprenderse de activos no estratégicos que permitan sanear las cuentas de la cooperativa, o de reestructurar algunas de las áreas de actividad que se vienen desarrollando en la actualidad. Porque, tras conocer, a través de una auditoria de gestión, la situación de todos los proyectos se ha visto que en algunos casos no están cumpliendo las expectativas de negocio con que se habían planteado inicialmente. Entre esas medidas, se estudiará por ejemplo la posibilidad de vender terrenos de la antigua azucarera, situados en la Carretera de Cabezón, en el término municipal de Valladolid, así como las posibles alternativas para la planta fotovoltaica de Tordesillas. Las instalaciones industriales de Valladolid permanecen cerradas desde hace varios años, sin perspectivas de que vuelvan a abrirse, y su actual situación supone para la Cooperativa un elevado coste económico por su mantenimiento, seguridad y otros gastos. Además, se analizará también la posibilidad poner en venta las diferentes parcelas agrarias con las que cuenta ACOR en Rumania, algunas de ellas en propiedad, con el objetivo de optimizar los activos y mejorar la eficiencia en la gestión.

RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx