TE281 - Tierras Agricultura

nº 281 46 NUEVOS RETOS PRODUCTIVOS PARA LA HORTICULTURA AL AIRE LIBRE VII CONGRESO (NO3 -) y eutrofización de aguas (PO4 -). También la adaptación a aguas de mala calidad (salinización) es otro factor de estrés derivado del cambio climático sobre el que trabajar en fitomejoramiento. Para estos nuevos retos las variedades antiguas representan una diversidad genética muy interesante, pues evolucionaron en una agricultura de menores insumos que las actuales variedades modernas, más adaptadas a producción intensiva y de altos insumos. Tanto para ser seleccionadas per se para esas condiciones de bajos insumos o de estrés, como para servir de material de premejora y aportar genes de interés en la mejora de las modernas. TI.- Teniendo en cuenta el mercado y todos los ensayos realizados, ¿cómo será la zanahoria del futuro? ¿Las zanahorias resistentes a sequía o a plagas tendrán la misma producción? A.R.B.- Se observan dos nichos de mercado: i) el convencional de zanahoria nantesa (naranja), que seguirá siendo seleccionada para los caracteres habituales y los nuevos retos del cambio climático y ii) otro creciente en el que el consumidor urbano empieza apreciar otros tipos diferenciados (variedades tradicionales como p.ej. la morada de Villena y otras zonas) procedentes de agricultura local, mínima huella de carbono y producción sostenible. TI.- ¿Habrá una zanahoria ‘a la carta’ para cada tipo de consumidor? A.R.B.- Efectivamente, las numerosas iniciativas locales para el desarrollo de variedades tradicionales locales adaptadas a la agricultura sostenible de condiciones agroclimáticas determinadas (p.ej. morada de Villena), unido a la mejora participativa con agricultores locales y consumidores, implica la recuperación de variedades ancestrales adaptados a nuevos gustos del consumidor TI.- ¿Qué futuro tiene la zanahoria en la alimentación? ¿Qué futuro tiene en el campo español? A.R.B.- La zanahoria es una de las hortalizas más importantes de Europa en términos de producción y superficie de cultivo. Es también base de elaboración de alimentos (ensaladas, cocinadas, elaboración de potitos y pastas vegetales, 4ª gama como palitos de zanahoria, etc.). Adicionalmente, su extraordinario valor nutritivo basado en su contenido en a-caroteno y b-caroteno (y antocianos en las moradas) y fibra es otro valor añadido intrínseco. Un aspecto esencial implica la diversificación de la producción basado en variedades locales (que aportan nuevos sabores, aromas, texturas y apariencias) y/o producción ecológica. Todo ello puede contribuir a dotar al sector agrícola español de un nuevo nicho de mercado con mayor valor añadido. TI.- ¿El mercado remunera correctamente al productor? ¿Cuál es el precio mínimo para cubrir gastos? A.R.B.- Debido a su intensificación (siembra, riego y cosecha) se han abaratado mucho los costes, por lo que el precio pagado al agricultor es cada vez más bajo. No obstante, la gran producción que ofrece este cultivo todavía compensa. En cualquier caso, la diversificación recuperando tipos tradicionales y agricultura sostenible y con una relación más directa entre agricultores y consumidores locales puede ofrecer precios más altos al agricultor. T

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