Tierras 97 nº 280 (año 2019) menos fina, pero más rica en ésteres, que los de los otros lavandines de 28 a 32%, mientras que el ordinario tiene solamente del 16 al 27%. - Super: es cultivado cuando se prefiere la calidad de la esencia, que es más fina, menos canforácea que la de variedad Abrial, con un porcentaje en ésteres que llega al 49%, muy superior a la media de los demás lavandines. Sin embargo, el rendimiento en esencia es algo inferior al ● Abrial, del orden del 1,5%. - Grosso: es una variedad muy vigorosa y homogénea, con una precocidad muy alta. Sus flores presentan una tonalidad más azul que las flores de Abrial. Es muy rústica al igual que la Súper y se comporta bien a las mismas altitudes. Tiene mayor rendimiento en esencia que los dos tipos anteriores (Abrial y Súper) pero su esencia es de calidad inferior. ● Época de trasplante Aunque se pueden trasplantar durante todo el año, debido al uso de riego en algunas de las parcelas, se recomienda llevar a cabo el trasplante durante el otoño o la parada vegetativa. ● Densidad de plantación El marco de plantación varía dependiendo del tipo de variedad (espliego, lavanda, lavandín), en la provincia de Valladolid, para las variedades de lavandín se ha establecido un marco de plantación de 0,50 – 0,70 cm entre plantas y 1,80 – 2 m entre calles, con una densidad de siembra de 10.000 plantas/ha aproximadamente (Foto 7). ● Material de trasplante La plantación se hace a máquina, la manual solo se practica en parcelas con pequeña extensión. La plantación mecánica se hace con una máquina trasplantadora de pinzas. ● Abonado Aunque son plantas poco exigentes en abonos, hasta el punto de que algunos técnicos aconsejan no aplicar fertilizantes. Se ha demostrado que responde bien a los mismos. A modo de ejemplo, en la provincia de Valladolid se ha hecho una aplicación de abono complejo de 250 kg/ ha de un fertilizante con un 8% de riqueza en nitrógeno, 24% en fósforo y 16 % en potasio, en una sola aplicación. No debemos olvidar lo importante que es un análisis del terreno en los momentos previos al abonado. Debemos saber las necesidades de nuestro cultivo y las características de nuestro suelo, para que la fertilización se ajuste lo mejor posible a nuestro bolsillo y a las necesidades de la planta. ● Riego Como especie xerófila, soporta bien la sequía mediterránea. No obstante, las prolongadas sequías le son siempre perjudiciales, ya que pueden reducir la cosecha en un 50%, sobre todo en el periodo anterior a la floración. En algunas plantaciones de Valladolid, se han aplicado 2 riegos de 30 l/m² durante todo el ciclo del cultivo. Estas aplicaciones se dan antes de floración, ya que es el momento en que la planta tiene mayores requerimientos Foto 7. Densidad de plantación del cultivo. Foto 8. Cultivo de lavandín con malas hierbas. Cultivos alternativos
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