62 CASO DE ÉXITO como ejes X e Y. Para la reconstrucción de las piezas del avión se utilizó una impresora 3D de tipo Saturn. Con un espacio de trabajo de 1.200 x 1.000 x 1.000 mm, representa la segunda impresora 3D fabricada por Atmat en formato XXL después de la Jupiter. “Desde el principio, nos concentramos de forma paralela tanto en los proyectos específicos de los clientes como en las impresoras 3D. Solo gracias a los conocimientos que hemos adquirido en materia de impresoras 3D compactas hemos podido desarrollar una tecnología de impresión 3D eficaz y de gran formato como la que se utiliza en los modelos Jupiter y Saturn”, subraya Robert Grolik. Jupiter y Saturn no solo son idóneas para la creación de prototipos funcionales. Los sistemas están diseñados para integrarse directamente en las líneas de producción, lo que permite optimizar la producción en masa de componentes individuales en 3D. “Las empresas internacionales, sobre todo las del sector del automóvil, están encantadas de aprovechar todo esto”, explica Robert Grolik. El motivo: la individualización de los vehículos, además de las numerosas opciones de equipamiento disponibles, es cada vez más importante. “La tecnología aditiva permite la producción de estas opciones de equipos personalizados, en poco tiempo, de forma sencilla y con pocos gastos financieros”. No solo permite imprimir componentes tan sencillos como tapacubos o elementos del volante; hoy en día se pueden implementar estructuras más grandes y bastante complejas, incluidos los salpicaderos y los elementos de iluminación. Además, los fabricantes de vehículos se están tomando en serio la posibilidad de utilizar la impresión 3D para la producción de automóviles enteros, no solo para series limitadas de vehículos, sino también para prototipos funcionales, con el fin de poder presentar el aspecto real de un nuevo modelo de tamaño 1:1 incluso antes del inicio de la producción en serie. Esta tendencia no solo se da en la industria del automóvil: “Lo vemos en la creciente proporción de pedidos inusuales y de pequeñas series de productos”, señala Robert Grolik. Esto se debe a que la impresión 3D no solo permite probar soluciones innovadoras antes de la producción, sino que también simplifica la organización de la producción de pequeñas series por parte de las empresas. Ya no es necesario pedir y almacenar los componentes por adelantado, pues se imprimen en función de las necesidades. La impresora de gran formato Saturn es un excelente ejemplo de estas ventajas. Desarrollada especialmente para aplicaciones sofisticadas (es decir, de alta precisión), la máquina combina un banco de trabajo de granito macizo con un eje de pórtico equipado con dos unidades de impresión (cabezal principal y auxiliar) para una alta velocidad de impresión. El cabezal principal está compuesto por dos extrusores con una o dos boquillas de impresión. Esto acelera considerablemente la impresión, incluso en el caso de geometrías complejas, según explica Robert Grolik. La temperatura correcta de la plataforma de trabajo está garantizada por un sistema de calefacción de cuatro zonas integrado en la gran mesa. Sus controles de temperatura independientes no solo reducen el consumo de energía, sino que también permiten alcanzar más rápidamente la temperatura de trabajo establecida. Para mantener la temperatura constante, la enorme zona de impresión está instalada en una cámara de calefacción aislada. Los servomotores AM8121 de Beckhoff, en combinación con los terminales de motor paso a paso EL72xx, proporcionan una alta velocidad y precisión durante el movimiento de los cabezales de impresión. Foto: Atmat.
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