TecnoCarne_TC34

75 LOGÍSTICA de pedidos y la gestión de envíos, la calidad y seguridad de los productos almacenados y la seguridad e higiene laboral. La IA se aplicará especialmente en la planificación de rutas, la predicción de la demanda y la detección temprana de problemas en los sistemas de refrigeración. Esta última aplicación vendrá acompañada de la introducción masiva de sensores, etiquetas inteligentes y sistemas de seguimiento en tiempo real. SOSTENIBILIDAD ENERGÉTICA DE LOS ALMACENES Con el creciente enfoque de las políticas públicas en el cambio climático, las empresas están buscando formas de reducir su huella de carbono, tanto en el consumo de energía como en la gestión de los desperdicios. La megatendencia social de la sostenibilidad medioambiental se manifiesta en el caso del sector de la logística del frío, por su carácter electro intensivo, especialmente como sostenibilidad energética. Esta tendencia ha sido plenamente asumida por el sector tras la pandemia sanitaria y en un contexto de alza generalizada del precio de la electricidad, por lo que ya está presente en la planificación y la gestión de los almacenes de frío y se espera una aceleración en su implantación y profundización durante este trienio. La tendencia de sostenibilidad energética se concreta en dos grandes medidas: el aumento en el uso de energías renovables en los almacenes y el énfasis en la eficiencia energética. Además, plantea afrontar un tercer reto, debido a cambios regulatorios: el recambio de los gases clorofluorocarburos (CFC) como refrigerantes por otras soluciones tecnológicas, como los gases A2L o la refrigeración por CO2. En los próximos años se asistirá a un profundo cambio en la tecnología del frío y, previsiblemente, a investigaciones aplicadas de nuevas soluciones. Esta tendencia está ligada con las dos anteriores, ya que las empresas de logística de la cadena de frío necesitarán abordar los desafíos medioambientales y tecnológicos simultáneamente, como invertir en la automatización total para reducir el consumo de energía y las emisiones y aumentar la productividad. Se requerirán inversiones sustanciales para mejorar las instalaciones de almacenamiento en frío actuales: por ejemplo, en sistemas de refrigeración, aislamientos y energía renovable en el sitio. REDUCCIÓN DE LA HUELLA DE CARBONO DEL TRANSPORTE DE MERCANCÍAS La tendencia de la sostenibilidad ambiental es común con el sector complementario del almacenamiento en frío, como es el transporte de mercancías. Será progresiva la implantación de vehículos eléctricos para el transporte por carretera y el reparto de la última milla. La IA permitirá la optimización del transporte de productos refrigerados en las rutas y las cargas. Se prevé que los avances en la planificación de rutas y los sistemas de gestión de flotas ayuden a abaratar, mejorar la eficiencia, reducir los tiempos de entrega y lograr la neutralidad energética del transporte. CRECIMIENTO SOSTENIDO DE LA DEMANDA DE ALMACENAMIENTO EN FRÍO. La pandemia sanitaria de 2020 aceleró la transición al comercio electrónico y la conciencia para adoptar una alimentación más natural y saludable. La convergencia de estos dos fenómenos ha generado una mayor demanda de productos frescos y congelados tanto en el comercio tradicional como en el reparto a domicilio. Las previsiones para el corto plazo es que seguirá subiendo el consumo de alimentos congelados en todo el mundo, incluido Europa. n

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