17 A FONDO - ESPECIAL FERIAS como la que había hace cuatro o cinco años atrás. La gran mayoría de ferias se ha reinventado o, incluso, reubicado. El año pasado, fue Eurobike que estrenaba ubicación en Frankfurt. Este año, ha sido Festibike, que empezó una nueva etapa en Villanueva del Pardillo. ACTUALIDAD Las ferias son un punto de encuentro ideal para cualquier sector, no solo para el bike. Aquí te encuentras con clientes, competencia, dealers y futuribles. Todos sabemos que los encuentros cara a cara son mucho más positivos y útiles que los correos electrónicos. Por no hablar de la posibilidad de probar los productos, cosa que en el sector bike es sumamente importante. Ya te pueden contar que su producto es el mejor de todos que, hasta que no lo ves en vivo, no te lo crees. A lo largo de este año, hemos asistido a varias ferias bike como medio especializado. Y no tenemos espacio suficiente para contar todas las experiencias que podríamos sacar de cada una de las ferias en las que hemos estado presentes. En algunas de ellas, solemos tener stand propio, y en otras, venimos solo de visita. Una de las ferias más importantes de España, Festibike, cambió este año de ubicación y de fechas. Y el resultado fue de lo más positivo, sobre todo si tenemos en cuenta el poco tiempo que tuvieron para prepararla. Festibike puso el foco en la gran cantidad de actividades deportivas y competiciones que celebró durante ese fin de semana. Es un modelo que cada vez vemos más, que atrae a mucho público final deseoso de ver expuestos los mejores productos al mismo tiempo que sale a pedalear unas horas. Y, por supuesto, no olvidemos la gran oferta de Test Bike que había en la feria, que permitió a muchos usuarios probar distintas marcas de bicicletas, y también tipologías distintas. Es muy recomendable que, si no se ha probado nunca algún tipo de bici, se aproveche el día de feria para dar un paseo con algo que no se domine tanto. Por poner un ejemplo, poca gente ha probado nunca una e-Gravel o una e-Cargo, y aquí es una buena ocasión. Igual que en Festibike, el evento Ciclosferia, celebrado en Valencia, también realiza una fuerte apuesta por los eventos. Aunque en este caso, especializado en bicis urbanas. Con un ambiente muy festivo y actividades paralelas de todo tipo (incluso con teatro), Ciclosferia se ha consolidado por tener una personalidad propia y por demostrar que el ciclismo es mucho más que una industria, que detrás hay un estilo de vida que define a sus usuarios. EL RETO DE SABER GUSTAR Eso sí, las ferias sólo tendrán futuro si las marcas encuentran su lugar en ellas. Y esto es algo que en Girona tenían claro desde el principio. Sea Otter Europe fue de las pocas ferias que se mantuvo al pie del cañón durante la post-pandemia, y muchas marcas estuvieron allí junto a los entregados visitantes que vienen año tras año. Una prueba de que esta feria ha encontrado la fórmula perfecta entre días profesionales, actividades y público final, es que sigue ampliándose. El espacio que dedica la edición 2024 es más amplio, hay más stands, más marcas… y presumiblemente, más visitantes. Un elemento a tener en cuenta, y que deberíamos considerar como el gran reto pendiente, es la poca presencia de las tiendas en las ferias. Sabemos que hay marcas que prefieren invertir en eventos propios en lugar de ir a ferias, y esto se debe al poco movimiento del retail en los grandes eventos B2B. Los profesionales vemos que hay un eslabón que falta en toda esta cadena. Tenemos a las empresas, las marcas, los distribuidores, y también nos visitan los clientes finales. Pero, en muchas ocasiones, la queja suele ser que no han venido demasiadas tiendas. A lo largo del año, vamos viendo ferias bike por todo el mundo como Roc d’Azur en Francia o las dos grandes ferias celebradas, curiosamente, en circuitos de carreras de automóviles: el Italian Bike Festival en el circuito de Misano (Italia) o Sea Otter Classic en el circuito de Laguna Seca (California, EUA). Es un buen recuerdo del origen de la mayoría de estas ferias ciclistas, pues su germen se sitúa en las carreras ciclistas. Las ferias suelen empezar unos pocos stands alrededor de la salida de una carrera, y se acaban consolidando como ferias. No suele pasar al revés. Para terminar el repaso ‘ferial’ mundial, no olvidemos tampoco la feria Taipei International Cycle Show, en la isla de Taiwan, ProDays en Toulouse (Francia) o la Velofollies en Bélgica. Todas ellas siguen atrayendo innumerables visitantes, ya sean profesionales o aficionados. Tenemos un mercado con un gran futuro, y con muchas maneras de aprovecharlo y conocerlo a fondo. Lo único que nos falta es tiempo. n
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