Lo que empezó siendo una pequeña preocupación entre los diferentes actores del sector, se acaba de confirmar como la principal amenaza sectorial para los próximos meses: un 98% de los proveedores y tiendas afirman que, a corto y medio plazo,el mercado va a sufrir una importante escasez de bicicletas y,en menor medida, de algunos componentes y accesorios. Así lo confirman los resultados del último estudio del clima sectorial que acaba de realizar SportPanel, justo en la entrada de este cuarto trimestre. Ya en mi anterior editorial hablé sobre el creciente convencimiento,entre el comercio especializado, de que a corto plazo las marcas y los distribuidores iban a tener serios problemas de servicio. Y en todas las categorías, desde accesorios, hasta componentes y, sobre todo, bicicletas montadas. El coronavirus, no sólo ha alterado muchos procesos en la producción, sino que, también, ha disparado las ventas muy por encima de lo previsto.La falta de capacidad productiva dificulta mucho,a marcas y distribuidores, poder programar entregas que, en algunos casos, ya están por encima del año.Y eso, evidentemente, implica perder muy buenas oportunidades. Este preocupante desabastecimiento llega en un momento dulce para el bike, tanto como deporte, con los índices disparados tras el confinamiento, como a nivel de movilidad; la bicicleta ha ganado mucho espacio como medio de transporte y, por fin,ha conseguido llamar la atención de unas administraciones que,en estos últimos meses,están apostando fuerte,a nivel local,autonómico y nacional,por promover su uso como “remedio” para hacer más sostenibles las ciudades. En este contexto, que ya se puede considerar un cambio importante de paradigma, es fácil entender las preocupaciones de los profesionales del sector.En un momento repleto de oportunidades,con las ventas de cara y las administraciones ayudando,la posibilidad de que las ventas caigan por falta de oferta es tan real como preocupante. No hay nada peor que no poder dar respuesta a las demandas del consumidor. Un consumidor muy informado, infiel a las marcas y en quien la inmediatez juega un papel fundamental para su decisión de compra. El sector, ahora más que nunca, necesita dar un paso al frente y aprender a gestionar con mayor eficacia esta nueva época que nos ha llegado, sin avisar, al mercado del ciclismo. A las marcas líderes le llega una nueva competencia mucho más preparada y eficiente, como es la de las marcas de motos -también entra en esta nueva división alguna que otra marca de coches-. Pero ojo, su canal natural es el concesionario, mucho más profesionalizado y que cuenta con herramientas más modernas y eficaces de gestión que los especialistas en la venta de bicicletas. Ahora más que nunca el canal ciclista necesita avanzar hacia una gestión global mucho más actualizada y eficiente, y no solo en B2B, sino en todas aquellas herramientas que agilicen los procesos de gestión tanto de marcas como de tiendas (empezando, por ejemplo, por desarrollar un EDI sectorial o por implementar programas de gestión de tienda más modernos, ágiles y rápidos, capaces, sobre todo, de almacenar, analizar y sacar partido a algo tan fundamental como los datos). En este sentido, es importante que, desde todos los actores implicados, pero especialmente desde las patronales de marcas y tiendas (AMBE y ATEBI) se apueste por un nuevo plan sectorial que tenga como principal prioridad la digitalización del sector. Es un paso imprescindible para que el bike pueda aprovechar las oportunidades que tiene hoy por hoy y,sobre todo,las que se van a dar en el futuro.Ahora,el sector,aunque nos pese, no está preparado para afrontar determinados retos, y si no damos un paso al frente, vamos a seguir perdiendo oportunidades. El sector tiene que coger este tren. 3 editorial Toni Amat Director toni@tradebike.es TradeBike&Tri defiende la pluralidad y la plena libertad de opinión, y de acuerdo con esta política admite cualquier tipo de colaboración coherente con los contenidos de la revista. Sin embargo, no se hace responsable de las opiniones expresadas por sus colaboradores ni de las consecuencias de cualquier tipo que de ellas se deriven, ya que dichas opiniones se entienden siempre a título personal y bajo entera responsabilidad del autor. opinión Jaume Ferrer Editor jferrer@tradebike.es Durante el confinamiento pronosticamos un repunte al finalizar el cierre, y realmente en el sector del ciclismo ha sido espectacular, pocos sectores en este momento cuentan con un auge como el nuestro. Pero la pregunta es... ¿moriremos de éxito? Los meses siguientes al confinamiento las ventas del sector fueron espectaculares a todos los niveles, las tiendas limpiaron todos sus stocks, antiguos, actuales y en ocasiones futuros, y con ellas sus proveedores, marcas, fabricantes, distribuidoras y demás. Pero en aquel momento todos ellos disponían de stocks; lo que tenían y habían dejado de vender en confinamiento, lo que los proveedores les había mandados con urgencia antes de cerrar las tiendas, e incluso novedades 2021 que empezaban a llegar. El problema nace durante el confinamiento, donde las empresas que no fueron “valientes” ante la incertidumbre cortaron programaciones, e incluso pagos de material ya servido. En pleno repunte los pedidos y las programaciones se han disparado, de tal forma que en ocasiones es difícil valorar si son reales o son programaciones desesperadas ante el miedo a no tener servicio, o servicio limitado, de sus proveedores habituales. Por otro lado,a las empresas que en confinamiento pararon pagos les han cambiado las clasificaciones en sus proveedores habituales,y por tanto esto afecta a su servicio y disponibilidad, y les obligará a mover ficha. Además, el sector el bike es un sector peculiar, pues es una industria donde algunos de sus componentes vitales como pueden ser grupos, cuadros o motores de e-bike, se concentran en muy pocas marcas o proveedores de prestigio, lo cual en estos momentos está provocando auténticos embudos. Estos proveedores claves han aumentado o están aumentado sus producciones, pero no al ritmo ni en los volúmenes que el mercado demanda. Hay plazos de entrega de 330, 280… días. La situación no es fácil de gestionar en estos momentos, algunas empresas, fabricantes, marcas o distribuidoras tiene auténticos problemas al no disponer de stocks y todavía más grave no disponer de plazos de entrega concretos de sus nuevas producciones o de componentes vitales para ellas, con todo lo que ello implica a nivel de gestión de clientes. Por otro lado, con el boom de las e-bikes vemos que estos últimos años sectores “próximos” están tomando cada vez más interés en el bike, pues su evolución es mucho más prometedora en estos momentos que su sector.Así podemos ver algunos ejemplos claros, por nombrar algunos como Yamaha o Polini con motores para e-bike, o Kymco, Husqvarna, BMW, Ducati o Seat que muestran cada vez más interés y ya disponen de e-bikes propias, ya sean urbanas o de Mountain, también Harley Davison a anunciado el lanzamiento de su e-bike para junio.Todas ellas empresas del mundo de la automoción acostumbradas a trabajar con otros volúmenes, dimensiones y condiciones.Y además con canales y redes de distribución propias. El mercado del bike está en pleno auge y hay que aprovechar el momento para vender mucho; pero también hay que tener presente que vienen tiempos movidos, donde veremos grandes cambios en el sector del bike, con la llegada de nuevos proveedores y players. La profesionalidad marcara la diferencia para estar en esta nueva era o no, por ello debemos seguir preparándonos y profesionalizándonos cada día, y sobre todo no perder de vista los cambios y novedades que van llegando para adaptarse rápidamente a ellos. ¡Adaptarse o morir! Un sector demasiado atractivo Proveedores clave han aumentado sus producciones, pero no al ritmo ni volúmenes que el mercado demanda Al sector le ha llegado, de repente, un importante cambio de paradigma… repleto de oportunidades. Digitalizar el sector
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