bikecracia 84 En bici al cole: la cultura de la bicicleta se forja en las escuelas Netflix ha estrenado recientemente la segunda temporada de Sex Education. En ella, los protagonistas Otis Milburn y Eric Effiong acuden siempre a la universidad en bicicleta. Igual lo hacen muchos de sus compañeros. Se quitan los cascos, aparcan la bici al lado del recinto escolar y se lo pasan geni(t)al en clase. En Finlandia, concretamente en Oulu, una de las ciudades más al norte del país, sufren constantemente condiciones climatológicas muy adversas en invierno, como frío severo y nieve. Sin embargo, muchos de los niños en edad escolar van a clase en bicicleta. No importa si hay un metro de nieve, si el suelo está helado o si las temperaturas pueden estar durante todo el día por debajo de -15ºC. Oulu es un ejemplo de ciudad donde la bici se utiliza en todas las épocas del año.Y hacen uso de ella los adultos y los más jóvenes. Pongámonos en contexto. Ni estamos en una serie de sexualidad ficticia ni somos un país del Norte. Pero hay una consideración que es evidente. Para que el futuro de nuestro país vea la bicicleta como un medio perfectamente válido para acudir a clase hay que dotarla de las infraestructuras adecuadas y necesitamos mucha pedagogía, educarla a favor de las políticas sostenibles desde muy pequeños. Adoctrinarlos. Por Pol Figueras Periodista y colaborador La iniciativa, que nació hace más de una década, tenía como objetivo fomentar el uso escolar de la bicicleta entre los estudiantes más jóvenes. ¿Qué hacemos (mal) en España? Aquí, cuando caen cuatro gotas se colapsa el país. Especialmente, las grandes ciudades. Y con temporales de nieve o de lluvia,ya llamamos al trabajo para decir que te es imposible llegar: ni a pie, ni en bici, ni con nuestra querida RENFE ni, obviamente, en coche, ya que el caos es total. Para nuestro alumnado, no le es rentable ir en bicicleta al centro escolar. Básicamente, porqué no se les garantiza un mínimo de seguridad. Ya sea por la conducta de los demás conductores o porqué no disponemos de las infraestructuras adientes: no cuentan con una zona segura donde aparcar las bicicletas ni, en muchas ocasiones, carriles bicis para que no tengan que compartir la vía con los coches. Hay un argumento de mucho peso que tampoco ayuda: no se nos pasa por la cabeza convertirnos en una sociedad cuyo medios de transporte sean sostenible y saludables. ¿Como lo podemos mejorar? Si bien contamos con numerosos e impagables proyectos como la Red de Ciudades por la Bicicleta, IMBA España, Ciclojuristas o Bicicletas Sin Fronteras, nos queda todavía mucho camino por recorrer. Es por eso que debemos empezar por abajo. Por la generación futura. Y por esta razón nació en 2007 la iniciativa Con bici al cole, promovida por ConBici (Coordinadora en Defensa de la Bici) y subvencionada por el Ministerio de Medio Ambiente (así se llamaba por aquel entonces dicho departamento). La campaña Con bici al cole nació con vocación integradora: no quería ser una guía cerrada que venga impuesta, sino un compendio de ideas, iniciativas y eventos que se pueden poner en práctica, transformar, mejorar y enriquecer. Sus objetivos eran la protección del medio ambiente, la mejora de la movilidad urbana, la seguridad vial y la adquisición de habilidades sobre la bici. También pretendía implicar a las entidades locales en la creación de caminos escolares o en la solución de los problemas que dificultan llegar a los colegíos en bicicleta de forma autónoma y segura. Dirigida a toda la comunidad escolar implicada en los tres ciclos de primaria, es decir alumnos, familias y docentes, la campaña se desarolló principalmente dentro de los centros escolares, pero también propuso sesiones por la ciudad (Caminos Escolares, excursiones a plazas, etc.) y salidas a parques o parajes naturales cercanos.
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