a fondo 32 Hay que tener en cuenta que los éxitos de los triatletas españoles, liderando las clasificaciones a nivel mundial: Javier Gómez-Noya, Mario Mola, Fernando Alarza, Vicente Hernández, Uxió Abuín, Carolina Routier, Ainhoa Murua, Iván Raña o Eneko Llanos son algunos de los nombres más destacados. Aunque falta mucho trabajo por hacer en los medios de comunicación. Solo los que están más arriba tienen su eco, los que participan en Kona, en las más relevantes pruebas mundiales, hacen su sitio en la eternidad.Y estamos en un año preolímpico: para Tokyo 2020 las expectativas son muy altas. La triarmada puede hacer muy buen papel, volver con algún metal.Y no solo en hombres, también en mujeres. Las licencias, un indicativo El número de licencias expedidas por las federaciones deportivas es un buen parámetro para valorar la situación de los deportes. En el año 2017 aumentaron las licencias en la Federación Española de Triatlón (FETRI) con respecto al año 2016, se pasaron de 27.760 a 30.744, un hecho que ya es un mensaje de “que no estamos tan mal”. Aire fresco, piernas nuevas, más deportistas con ganas de hacer del triatlón un deporte grande. Aún no se ha publicado el Anuario de Estadísticas Deportivas 2019 que elabora el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de España. En él podremos saber el número de licencias en 2018, con el que podremos analizar la última actualización en salud del triatlón, así como la proporción de hombres y mujeres practicantes, que en 2017 se situó en 24.728 (80,4%) y 6.016 (19,6%) respectivamente. También hay un incremento en el número de clubes de triatlón, que en 2016 se situó en 1.038 y en 2017 se han registrado un total de 1.109 (+71). nos. El problema es que han sido muchos los que le han atribuido al triatlón un potencial que no tenía.Y la saturación llegó a las tiendas: más oferta que demanda. La realidad, pese a quien le pese, es que el triatlón, con boom incluido, sigue siendo un deporte minoritario y la cifra de practicantes no justifica las innumerables aperturas que ha habido en los últimos años, especialmente en las grandes ciudades. Muchos empresarios han abierto tiendas porque les gustaba este deporte o porque creían que era la gallina de los huevos de oro. El problema es que no han tardado en ver que las cosas no son tan fáciles y que salir adelante implica un gran esfuerzo. Una tienda especializada requiere mucho trabajo y necesita unos años para funcionar bien. Todo está cambiando pero podemos ser optimistas. El crecimiento, aunque sostenido, viene tanto a nivel profesional como amateur. Un crecimiento natural para el reajuste del mercado. El triatlón no morirá nunca, ni será residual. Siempre será una opción para los practicantes del running, el ciclismo y la natación. Seguirán abiertas tiendas de alta calidad especializadas, las marcas seguirán apostando de manera fuerte y clara por sus gamas, nacerán nuevos proyectos, se celebrarán las pruebas de siempre y se realizarán de nuevas, y los profesionales españoles de la elite del triatlón seguirán siendo un bue ejemplo para el que empieza a practicarlo. El freno de ventas y los horizontes Los problemas empiezan en lo relativo a las ventas. Y no precisamente porque hayan caído, al contrario. El crecimiento en practicantes se tradujo, lógicamente, en un boom de las ventas, especialmente de calzado, bicicletas y neopreLa realidad, pese a quien le pese, es que el triatlón, con boom incluido, sigue siendo un deporte minoritario a pesar del gran número de practicantes La re s de nte
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