68 TB un esfuerzo más suave y llevadero que disminuye la fatiga muscular total y que beneficia. Por lo tanto es mejor para mantener una cadencia, sobretodo en puertos de montaña y rampas duras. Ayuda a borrar la sensación de que cada dificultoso golpe de pedal hace que la rueda avance un metro – típica sensación en rampas superiores al 10%–. Aquí la pedalada se mantiene, la velocidad y el avance también. -Mejora nuestro rendimiento. Desde que montamos los Q-Rings y gracias a alguna que otra aplicación para smartphones que invita a competir, nuestros tiempos no han parado de disminuir en los mismos tramos: ya sean subidas, bajadas o llano. Vamos más rápidos utilizando los mismos recursos. -Disminuyen la fatiga muscular. Se nota cuando hemos intentado acabar etapas de alta montaña de un centenar de quilómetros con medias superiores a los 26 km/h. El resultado es mejor que con platos redondos. La fatiga, algo menor. En resumen, la utilización de estos platos “lógicos” hace que podamos aprovechar mejor nuestra capacidad motora a la hora de empujar nuestra bicicleta y, si a eso le sumamos una disminución de la fatiga y un mayor cuidado por nuestras articulaciones, conseguimos un resultado óptimo y beneficioso para una de nuestras más nobles aficiones. PROGRAMAS DE LA MARCA PARA CONVENCER AL CLIENTE Rotor es una empresa que ha sabido vender su tecnología de platos ovales de modo que la mayoría de ciclistas conoce sus productos o bien quiere conocerlos y, sobretodo probarlos. Bien es sabido que en el mundo del ciclismo conviven varios corrientes de pensamiento: algunos viven en el ciclismo romántico del pasado y creen firmemente que el ciclismo y el sufrimiento van de la mano; otros, gran parte de las nuevas generaciones, apuesta por las innovaciones, la comodidad, la eficiencia mecánica y todos los avances que hacen que el sufrimiento – totalmente presente– se haga más llevadero. Por esa razón, por la convivencia de opiniones dentro de cada grupeta de ciclistas, Rotor ha sabido desarrollar un programa de pruebas de sus productos para convencer a todo aquel que quiera dejarse seducir por un sistema de platos más lógico y eficaz. “Pruébalos, es gratis” La marca madrileña ofrece la posibilidad de probar sin compromiso los platos mediante la promoción “pruébalos, es gratis”. Bajo este programa, el cliente final tiene que acercarse a una tienda que disponga de productos Rotor entre su oferta de material y mostrar su voluntad de acogerse al programa. A continuación, lo que debe hacer es pagar los platos –como si los comprara de una forma habitual– y durante un mes puede evaluar su idoneidad y su agrado. Pasado este periodo de tiempo, el cliente tiene la posibilidad de quedárselos o bien devolverlos a la tienda. En caso de devolución y, según las preferencias de cada tienda, se le reembolsará el importe total de los platos o bien se le extenderá un cheque por valor de la misma cuantía para gastarlo en la misma tienda. “Q-test” Este es un programa que solo tienen a disposición de sus clientes las tiendas Premium. En este caso los Q-Rings se caracterizan por ser de color rojo. A diferencia de la disponibilidad que ofrece el programa “pruébalos, es gratis”, el programa “Q-test” ofrece solamente las relaciones 53/39 BCD 130 y 50/34 BCD 110 para carretera y/o triatlón y las relaciones 38/25 BCD 104-64 para montaña. La prueba de estos exclusivos “platos rojos” es totalmente gratuita y el material debe devolverse al final de la misma. Enric Salvans, responsable de taller de Fanatik (Vic, Barcelona) Háblanos un poco de los Q-Rings y de sus diferencias fundamentales con los platos redondos convencionales. Desde pequeño he estado en contacto con el mundo de la bicicleta. Al principio, con los amigos y más adelante empecé a competir en distintas modalidades: mtb, ciclocross, duatlones y triatlones. Actualmente sigo practicando todas ellas. A muy temprana edad ya me dedicaba a arreglar mis bicicletas y un día llego la oportunidad de trabajar en una tienda de triatlón. ¡Aquí estoy! ¿Qué es lo que más pregunta el cliente acerca de los platos ovales? ¿Cuesta convencer al cliente indeciso o el cliente que los quiere ya conoce sus prestaciones? Lo que más pregunta el cliente es si realmente funcionan. El cliente que los desconoce normalmente no se la quiere jugar a pagar su precio… pero gracias al programa “pruébalos” de Rotor puedes decidir si te los quedas o los devuelves. ¿Cuáles son los argumentos que más se utilizan en vuestra tienda? Está demostrado que los Q-Rings son más efectivos y mejoran el rendimiento. Mueves una cantidad mayor de vatios y tus pulsaciones disminuyen un poco. ¿Algún ejemplo de situaciones con el cliente? Tuvimos un cliente con serios problemas de rampas en las piernas que decidió montar unos Q-Rings. Ahora dice estar encantado con ellos. ¿Suponen para ti –los platos ovales– un paso adelante en el ciclismo? Para mí, es necesario todo aquello que sean evoluciones que mejoran el rendimiento. ¿Se ajustan/desajustan más fácilmente o dan más trabajo a la hora de hacer la puesta a punto? ¿Proporcionan suavidad al cambiar? Es bastante complicado montar unos platos Q-Rings porque el ajuste debe ser minucioso y preciso. La distancia entre plato y desviador es mínima y hace falta hacerlo perfecto. No funcionan con la suavidad de unos Shimano pero aun así son suaves. ¿Cómo es su ajuste e integración en un sistema de cambio electrónico? Es la combinación ideal. Yo lo llevo montado en mi bicicleta hace dos años. Eso sí, recomiendo que lo monte un taller especializado. Cuéntanos algún truco, curiosidad o peculiaridad de estos platos a la hora de entrarlos en el taller, montarlos, etc. En bicicleta de carretera basta con seguir las instrucciones de montaje y después saber ajustarlo. En el caso de la mountain bike se monta en la tienda pero el ajuste perfecto se acaba consiguiendo en marcha. LA OPINIÓN DE UN EXPERTO
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