El 21 de julio del año 1991, la emblemática sección de ciclismo de la Unió Esportiva Sants (fundada en Barcelona el 26 de abril del año 1922) creaba la Ruta dels 4 Cims. El mismo club organizador de la centenaria “Volta” Ciclista a Catalunya engendraba la cicloturista que sube los puertos míticos de Coll de La Creueta, Collada de Toses, Coll de Merolla y Coll de Pal; transcurriendo por el majestuoso entorno natural de las comarcas del Berguedà, Cerdanya y Ripollès; pasando por las poblaciones de Bagá, Guardiola, Pobla de Lillet, Castellar de n’Hug, Ribes de Freser, Campdevànol o Gombren. 25 años más tarde, el Club Ciclista 4 Cims, junto al patrocinio de Buff, recuperó la representativa marcha cicloturista catalana; cita que se hizo realidad el pasado 3 de julio y con la presencia de 1.200 ciclistas, cifra ideal para disfrutar de una fructífera jornada cicloturista en montaña y rodeados de un paisaje único. Bella y majestuosa, pero también dura. Los 3.600 metros de desnivel positivo de la Buff 4 Cims no te van a dejar indiferente; siendo el último puerto un postre difícil de engullir: Coll de Pal (19,3 Km +1.285 m y una altitud en la cima de 2.104 m). Por ello, uno siempre debería guardarse algo para el gran final. Tras la salida en Bagà, en dirección a Castellar de n´Hug y La Molina, afrontamos el precioso primer puerto del Coll de la Creueta. 21,4 Km y +1.080 m con una pendiente media del 5% (con pendiente máxima del 14% en el km 4 y del 10% en el km 11, 14, 16 y 17) para llegar a la cima a 1.925 metros sobre el nivel del mar. Las montañas cubiertas de un manto verde y sus vistas panorámicas son espléndidas. No es un puerto excesivamente duro y desde la salida de la marcha nuestras piernas todavía se encuentran en perfecto estado. Tiene un factor psicológico que uno debe superar: a vista se ve la carretera que te lleva hasta la cima e inevitablemente piensas en “todavía me queda eso”. La bajada no es menos espectacular y nos lleva hasta la zona de Alabaus de la Estación de Esquí de La Molina (comarca de la Cerdanya), lugar donde se separan los ciclistas que hacen la 4 Cims y los que hacen la 2 Cims (110 Km y +1.800 m). Pasado el pueblo de La Molina y en dirección a Alp, tras disfrutar del espectacular paisaje que nos ofrece la Sierra del CadíMoixeró, a nuestra derecha empezamos a subir el segundo puerto de la jornada, la Collada de Toses (21,7 Km +700 m con una pendiente media del 3%). Siendo un gran eje de comunicación del Pirineo oriental con la Cataluña central, no es un puerto duro y si subes en grupetto te va a pasar volando. La bajada hasta Ribes de Freser es rápida y requiere de precaución, entramos en la comarca del Ripollés y nos dirigimos hasta la población de Campdevanol para luego coger el desvío hacia la derecha en busca del tercer puerto del día. Coll de Merolla marca la frontera entre las comarcas del Ripollés y el Berguedá. De entrada, sus 12,6 Km y pendiente media del 2,7% no son un duro escollo pero cuando llevamos más de 120 Km en nuestras piernas, el calor aprieta y tenemos el Coll de Pal en el horizonte, nuestro punto de vista cambia. Mucho mejor subir el tercer puerto con calma que lo fuerte está al final de la Buff 4 Cims. Llegamos a Bagá, punto de salida de la marcha cicloturista y lugar donde finaliza la 2 Cims, para los de la gran fondo todavía nos queda lo más duro. Tras avituallamiento obligatorio, empezamos a subir un electrizante Coll de Pal de 19,3 Km, pendiente media del 6,6% y +1.285 m. Es un puerto de La cicloturista más bella Los 162 Km y +3.600 m de la Buff 4 Cims transcurren por el majestuoso entorno natural de las comarcas del Berguedà, Cerdanya y Ripollès Por Adrià Julià Equipo Tradebike&Tri - ESPECIAL ROAD - 32 TB
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