TB20 - TradeBike 20 - Especial Triatlón

“No hago nada especial, no hay ningún cuento de hadas detrás” En la historia siempre ha habido personas que, con su bicicleta, han querido ir más allá de su condición de humano. El primer caso, el más famoso, es el de Charles Terront, primer vencedor de la París – Brest – París. Desde aquel entonces se han organizado una multitud de pruebas de ultrafondo para personas que querían llegar al límite. Así, con los años, llegamos a las Powerade Series. Cuenta Juan Porcar, CEO de Alesport / RPM Events, que, cuando organizaron la primera Madrid – Lisboa Non Stop, mucha gente les pidió para hacerla en solitario, y ellos no lo podrían creer. Así implantaron la modalidad solo. Entre los personajes anónimos que han superado el reto se encuentra Jordi Pereira, que por segundo año se ha erigido como un auténtico superhéroe. En solitario, y sin dormir en ningún momento, el catalán realizó los 709 kilómetros en 36 horas 29 minutos y 53 segundos. Un tiempo espectacular que ha sorprendido a todos. “Hacerlo con una bici extraña o hacerlo en categoría solo son otras maneras de disfrutar, en solo es la mayor aventura, pero también a nivel logístico es quien más dificultades nos presenta a la organización. Está de moda el cuanto más difícil, más complicado, más duro y lo seguiremos promocionando”, comenta Tajada. Así lo cuenta Pereira a Tradebike: “La motivación principal es superarse a uno mismo y ver cuál es su límite. Nunca hay que mirar lo que queda, hay que mirar lo que llevas. Si piensas al revés no llegas. La cuestión es la mente. No debo ser demasiado centrado. Si pienso que te duele todo y también pienso que ya se marchará. Si hablamos de logística, utilizo una Olympia CSLX2, una rígida normal, sin acoples, con un culote un poco superior que los de mi equipo, para ultrafondo. Solo llevaba una cámara y muchas herramientas, soy mecánico de coches y si tengo que perder horas arreglando la bicicleta no vale la pena seguir. En comida tomé fruta, plátanos, bocatas de Nocilla, barritas, geles, compota de fruta… En material llevo lo mismo que en una de 30km, la única diferencia me pongo crema en la entrepierna cada dos estaciones. En las estaciones de hidratación, estaba mi padre que me coge la bicicleta y me la pone a punto, me carga los bidones, de mientras como en una bolsa en la que me tiene que preparar una serie de cosas y cojo lo que me apetece. En Suera, 387km, como pasta. En Tafalla un bocadillo y luego lo mismo. Fue comer e irse. Algún momento cerré los ojos encima de la bicicleta, me quedaba dormido encima. Finalmente, me tomé un gel de cafeína pero no dormí. No hay nada mágico ni especial, mucha fuerza de voluntad. Esto lo puede hacer cualquiera, hay que entrenar pero hay que tener la capacidad mental de no decaer, de no perder los nervios.Yo ya había hecho ultramaratones y carreras de 24 horas. Trabajo entre 8 y 9 horas, vivo a 9km del trabajo y voy en bicicleta. Al mediodía salgo una hora y media. El fin de semana si hay carrera salgo y si no me quedo en casa. Esto es todo. En meta se me pasa por la cabeza que uno puede conseguir lo que quiera. Este año he ido más relajado, ya sabía lo que era. El primer año fue más duro, sobre todo el calor del desierto. Este año he ido por debajo de las previsiones. ¡Tenía que llegar a tiempo a la obra de teatro de mi hija! Mi padre me dijo que estaba loco pero esto funcionó”. “Está de moda el cuanto más difícil, más complicado, más duro y lo seguiremos promocionando” TB 75

RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx