TB2 - TradeBike 2 - Especial Road

Marchas cicloturistas... 8 TB En mi primer artículo para la revista TradeBike&Tri quiero hacerlo en honor a las marchas cicloturistas, las cuales se ven amenazadas de manera grave en los últimos tiempos. Las marchas cicloturistas vienen a ser algo parecido a las carreras populares en running, en el sentido de que el ritmo es libre y cada cual elije aquel en el que se encuentra más cómodo, y sirven también de excusa para entrenar y fijarse retos durante el año, así como para viajar, y conocer lugares y gentes que comparten tu afición. Al mismo tiempo, las marchas cicloturistas sirven para autoevaluar el nivel ciclista de cada uno y para compararse con otros, así como para disfrutar de etapas y puertos memorables y emular a nuestros ídolos. Al menos, así habían sido en general las marchas cicloturistas los últimos años, a excepción de algunas que eran controladas, es decir, todos los ciclistas participantes circulaban a una misma velocidad controlada por la organización. Bien es cierto, que ese ritmo libre provoca, en algunos casos, ciclistas que consideran las mismas carreras, y participan en ellas sin respetar las normas de tráfico poniendo en riesgo su seguridad y también la de otros usuarios de la vía, pues no recuerdan que estas marchas se desarrollan con tráfico abierto, es decir, puedes encontrar vehículos tanto en sentido contrario como en el mismo sentido de la marcha. Lo cierto es que en los últimos tiempos, no sabemos si por la profusión de marchas ciclistas que hemos vivido en los últimos años, provocada quizás por el incremento de practicantes, o por la inconsciencia de unos pocos ciclistas las marchas están siendo duramente controladas por algunas comandancias de la Guardia Civil, lo que está reduciendo de manera drástica el número de participantes, pues no encuentran en la misma sus objetivos , lo que unido a la caída de patrocinadores fruto de la crisis económica está poniendo en serias dificultades a muchas marchas. No quiero valorar desde estas líneas de manera negativa el trabajo ejercido por los Guardias civiles que acompañan las marchas cicloturistas, los cuales hacen un trabajo elogiable, ni tampoco de sus jefes o de la Dirección General de Tráfico, pero lo que tengo claro y lo anoto como una tarea pendiente tanto para la Federación Española de Ciclismo, como para la Dirección General de Tráfico, la Guardia Civil e incluso la Federación Española de Municipios y Provincias, es que con esta fuerte restricción están provocando la desaparición de muchas marchas cicloturistas que no sólo servían para que unos centenares o miles de ciclistas practicaran deporte, sino también para atraer recursos a las zonas donde se celebran estas, muchas veces zonas rurales que aprovechan el evento para poner el cartel de completo a casas rurales, pequeños hoteles y hostales, bares, restaurantes, etc., así como para vender diferentes productos y servicios, y mostrar sus pueblos y comarcas a un montón de visitantes con el objetivo de que vuelvan a disfrutar de sus servicios y recursos en futuras ocasiones, ya sea acompañados de su bicicleta o de familiares y/o amigos. No quiero dejar pasar por alto otra noticia negativa para los ciclistas, provocada, creo, también por la falta de entendimiento o de diálogo. Como todos conocéis , en las últimas semanas el ciclismo ha sido noticia “gracias” a que la Dirección General de Tráfico, pues quiere imponer el casco en la ciudad, una medida desaconsejada por las asociaciones de ciclistas, y que no utilizan los países bike-friendly, ya que han comprobado que medidas de este tipo desincentivan el uso de la bici, pues produce un efecto barrera para su utilización en trayecto urbanos, donde su versatilidad y facilidad de uso es la característica que hace que su crecimiento y penetración para la movilidad urbana sea fundamental, por eso no sólo se recomienda el no uso del casco en ciudad sino también su intermodalidad, es decir la capacidad para que la misma puede introducirse en autobuses, trenes o metro. Ambas situaciones la de la obligatoriedad del casco en ciudad, como el endurecimiento en la libertad de velocidad de las marchas ciclistas, son muy desfavorables para el ciclismo, pues le penaliza enormemente, ya sea para el uso de la bicicleta en la movilidad urbana, o en el cicloturismo como método de interrelación, turismo y práctica deportiva, y considero que el ciclismo y las instituciones que le representan tienen ante sí el reto de explicar a la Dirección General de Tráfico y Guardia Civil la urgencia de evitar medidas disuasorias o contrarias al uso de la bicicleta como las expresadas en este artículo, así como convencer a nuestros políticos de los beneficios de la bicicleta en sus diferentes vertientes. Sin lugar a dudas es una tarea dura, pero urgente y necesaria, que espero desarrollen con eficacia por nuestro bien. ARTÍCULO DEL MES Carlos Grande Secretario General de ASECODE foto: pedrodelgado.com

RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx