TB14 - TradeBike 14 - Especial Road

rir cuadros falsificados muy baratos. Además, muchos de ellos se dejan llevar por la típica – pero no correcta– afirmación de algún compañero que comenta: “las elaboran en la misma fábrica, y estas tienen pequeñas diferencias de diseño pero son igual de buenas”. Error. Por suerte, algunos de los compradores potenciales empiezan a navegar por internet y se dan cuenta que existe gente que ha explicado su nefasta experiencia a la hora de adquirir material falsificado que se le ha roto o le ha ocasionado peligrosos accidentes. ¿Por dónde entran? ¿Cómo llegan al consumidor final? Muchas son las vías por las cuales un consumidor puede llegar a tener en sus manos un cuadro o una bicicleta falsificada. En la mayoría de los casos, estos productos proceden del continente asiático. Eso supone una ventaja para los que se dedican al mundo de las falsificaciones, pues de entrada ya se confunde al posible cliente potencial porque la mayoría de marcas punteras de bike también fabrican sus bicicletas –originales– en la misma zona del mundo. La principal vía de entrada de falsificaciones, muy por encima de las demás, es internet. El comprador potencial tiene un mundo de posibilidades online para contactar directamente con webs que le permiten adquirir el cuadro que más le guste, de la talla que desee y pintado de su color favorito. Todo ello sin olvidar que los logotipos de la marca imitada son prácticamente idénticos a los productos originales. En el caso de los cuadros, suelen venir desmontados y con todos los componentes necesarios para ser montados. Se pueden pagar con tarjeta de crédito o muy a menudo con plataformas de envío de dinero como Paypal. También existen pequeños talleres repartidos por la geografía española que compran cuadros sin pintar como productos intermedios y después los pintan. Muchos de ellos ya han sido identificados tanto por los fabricantes como por las autoridades. Los envíos, que se demoran unas semanas, pasan por las aduanas –ilegalmente– y llegan a las manos del comprador, que recibe el paquete en casa. Riesgos para talleres, tiendas y establecimientos del sector El hecho de dar entrada a una bicicleta falsificada que nos trae un cliente a nuestro establecimiento, por la razón que sea (ajuste, revisión, cambiar la cadena, manetas, frenos, reparación de averías, etc.) hace que nuestra tienda se convierta automáticamente parte denunciada en caso que el cliente sufra un accidente como consecuencia de la más que dudosa calidad de esa bicicleta. Además, si hay lesiones graves en el accidente, la cosa se puede complicar aún más. Tanto la entrada del cuadro falso como el tratamiento de pintura posterior que se le da son ilegales, y constituyen un delito contra la propiedad industrial e intelectual. En cuanto al riesgo legal, este tipo de actividades constituye un delito contra la propiedad intelectual penado con prisión. Además, si el titular de la marca decide imponer una demanda civil, el riesgo que corren aquellos establecimientos o talleres que incurren en la ley 34 (2A y/o 2B) es de cesar inmediatamente la actividad, destruir el material falsificado, mostrar la contabilidad (hasta cinco años atrás) y abonar la cuantía tasada en concepto de indemnización que incluye: beneficios no ganados por la marca; beneficios del establecimiento; y royalties hipotéticos. Acciones que se llevan a cabo desde una marca como Pinarello Pinarello fue la primera marca en anunciar un comunicado después de la Operación Tourmalet. Los cuadros tope de gama de la marca italiana que más se falsifican son el modelo tope de gama de carretera y el modelo tope de gama de contrarreloj. Pero los materiales con los que se elaboran estas falsificaciones son de calidad muy inferior al carbono Toray que usa Pinarello. No solo son menos eficientes que los originales sino que también son más frágiles. Pinarello España colabora con Agencia Tributaria para denunciar a aquellas tiendas que trafican con producto falso y ha puesto varias demandas contra comercios que muestran bicicletas o cuadros falsificados bajo la marca, imagen o logotipos identificativos de Pinarello. Los complementos también se ven afectados Este hecho no solo afecta a bicicletas. Recientemente, Catlike ha anunciaba que no se hace responsable de los cascos falsificados que afectan a su marca y avisaban del peligro de usar productos falsos no homologados. “Las copias son algo que estamos combatiendo desde hace 4 o 5 años. Y lo estamos haciendo bien. Nuestro responsable de vigilar por la marca es un abogado de Milán que ha puesto unas 20.000 denuncias de falsedad en 1 año y 5 meses y tenemos acceso a las webs de compra – venta y subastas. Hemos bloqueado 1.100.000 de ventas de productos falsos. Estamos trabajando duro en este aspecto. Colaboramos mucho con la policía de aduanas sobre todo y ahora en Italia se ha aprobado una ley penal en este aspecto. Si te copian, es que la marca buena. A diferencia de otros productos, con la bicicleta hay un problema de seguridad, es muy arriesgado. Pienso que la vida vale un poco más. Al final, las copias falsas no dan las mismas prestaciones, no funcionan y no van bien. Especialmente cuando tienen un problema de ruptura o de garantía. Y en estos casos, nosotros no respondemos”. LA OPINIÓN Fausto Pinarello, CEO de Pinarello TB 33

RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx