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51 CIBERSEGURIDAD “Los proyectos y profesionales orien- tados a la protección, prevención y contención de este tipo de brechas de seguridad están en auge actual- mente en España. Más aún desde que grandes corporaciones y servicios esta- tales se han visto comprometidos, al filtrarse los datos de cientos de miles de usuarios”. FOMENTAR LA CULTURA DIGITAL La pandemia del coronavirus ha ace- lerado la digitalización de la sociedad, potenciando el uso de las nuevas tec- nologías en todos los ámbitos, lo que también ha aumentado los riesgos y las vulnerabilidades, apunta Adrián Nicolás Marchal, coordinador del Departamento de Derecho y director del Máster en Análisis de Inteligencia y Ciberinteligencia de la Universidad Nebrija. En el nuevo escenario, este experto destaca la importancia de los proyectos centra- dos en fomentar una cultura digital en la ciudadanía, que es “una de las mejo- res herramientas de prevención ante la delincuencia informática”. Esta cultura beneficiará también a las empresas, ya que “los ciberataques suelen tener como objetivo los descuidos o falta de conocimiento en ciberseguridad por parte de los empleados”. CIBERINCIDENTES Potenciar la ciberseguridad es un obje- tivo tanto del sector privado como del público. Marco Lozano, responsable de Ciberseguridadpara Empresas de Incibe, explica el papel del InstitutoNacional de Ciberseguridad. “Nuestro propósito es trabajar para afianzar la confianza digital entre ciudadanos, y elevar la cibersegu- ridad y la resiliencia en las empresas, especialmente las pymes y los servi- cios esenciales. De manera adicional, a través del Instituto se contribuye a la industria y el mercado digital, con el propósito de impulsar el uso seguro del ciberespacio en España, además de fomentar el talento en ciberseguridad”. Según Lozano, la gran dependencia tecnológica de nuestra sociedad con- tribuye a aumentar la superficie de exposición. “A mayor número de tec- nologías, más probabilidades existen de que se pueda producir un fallo, un problema o un incidente”. Ingeniería social, fuga de datos, phishing, ran- somware, formar parte de una botnet son solo algunas de las amenazas más frecuentes ante las que cualquier persona o empresa deberían estar capacitadas para hacerlas frente. “Es por ello, que la ciberseguridad cobra especial protagonismo, ya que única- mente a través de la implementación de esta, podremos sobreponernos a estas cuestiones tanto en el ámbito personal, como profesional”. En los últimosmeses, hemos visto cómo la ciberdelincuencia ha contado con una gran repercusiónmediática a causa de los ciberincidentes que han provo- cado. “Una tendencia a la que hay que poner freno y que, desde Incibe, tra- bajamos ofreciendo soluciones para minimizar el impacto en caso de que sematerialice la amenaza, y aportando conocimientoparaque tantociudadanos como empresas, adquieran capacida- des para hacerles frente”. n