TecnoSeaFood_SF13

64 ACUICULTURA mente para la producción de alevines en los criaderos, sino también para el crecimiento de estos durante todo el proceso de engorde. “Como sucede en las personas, la historia nutricional, es decir, la pauta de alimentación, durante los primeros estadios del desarrollo, deja una huella que perdura en el alevín y en el pez adulto. Incluso la alimentación de los progenitores se verá reflejada en el crecimiento y la salud de la progenie”, aseguró. Este fenómeno, conocido como programación nutricional, “consiste en el efecto que la alimentación y los nutrientes tienen en algunos periodos críticos de la vida y que pueden programar el desarrollo, metabolismo y salud del organismo para el futuro. De esta forma, los genes de la progenie se verán afectados epigenéticamente modulando su expresión de una forma programada”. La catedrática destacó que la supervivencia que se ha obtenido en criaderos semi-intensivos es mucho mayor que en ‘hatcheries’ comerciales, llegando a alcanzar hasta un 90% más. “Hay un estudio recientemente publicado sobre los resultados de cuatro ‘hatcheries’ comerciales de dorada en donde se constata que la supervivencia media a día 50 de las larvas es aproximadamente de un 26%” un dato, que, en su opinión, “es bajo”. “Muchas veces pensamos que si sobrevive el 25% de las larvas, quiere decir que va a sobrevivir el 25% más fuerte, el más robusto y de mejor calidad. Sin embargo, “sabemos que las larvas de peces marinos tienen un potencial de supervivencia muchísimo mayor del Marisol Izquierdo durante la Ponencia de Clausura. Foto: Tony Hernández. De izquierda a derecha, en la mesa presidencial, Héctor Pula, Sebastián López y Juan Manual Afonso. Foto: Tony Hernández. que realmente tienen en ‘hatcheries’ intensivas”. De hecho, continuó, “cuando hacemos la producción en sistemas semi intensivos o tipo mesocosmos la supervivencia puede incrementarse, en el caso de las larvas de dorada, entre el 40% y hasta, incluso, el 90%”. Izquierdo indicó que se ha avanzado mucho en el conocimiento de la nutrición larvaria, particularmente en los últimos 10 años, en los que se ha duplicado el número de publicaciones científicas en este tema. Esta información, sobre nutrientes como las proteínas, los omega-3 y algunas vitaminas y minerales, junto con el desarrollo de nuevas tecnologías en la producción de dietas microscópicas, afirmó la catedrática, “ha favorecido la aparición en el mercado de micro dietas de alta calidad”. “Sin embargo, aún quedan muchos retos por resolver como son el estudio del desarrollo larvario en especies nuevas para la acuicultura y la determinación de sus requerimientos. Esta información, además de permitir la expansión de estas nuevas especies, podrá ser aplicada también a otras ramas de la ciencia como las pesqueras, e incluso en otras especies de vertebrados, utilizando las larvas como modelo para resolver cuestiones incluso de salud humana”, concluyó. n G

RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx