TecnoSeaFood_SF13

54 SEGURIDAD ALIMENTARIA La cadena de frío se compone de una serie de procedimientos que garantizan el control térmico continuo de los productos perecederos desde su punto de origen hasta su destino final. Este control resulta fundamental para inhibir el crecimiento de microorganismos patógenos y evitar la degradación de la calidad sensorial y nutricional de los alimentos. En el contexto de la seguridad alimentaria, la cadena de frío actúa como una barrera crítica. Los productos como carnes, lácteos, pescados y ciertos vegetales son particularmente vulnerables a las fluctuaciones de temperatura. Incluso una pequeña interrupción en la cadena puede desencadenar la proliferación de bacterias comprometiendo la calidad del producto. DESAFÍOS DE LA CADENA DE FRÍO La implementación efectiva de la cadena de frío enfrenta varios desafíos. En primer lugar, la infraestructura es un factor limitante en muchas regiones. La falta de instalaciones adecuadas de almacenamiento refrigerado y de vehículos equipados con tecnología de control de temperatura avanzada puede comprometer todo el sistema logístico. La seguridad alimentaria, en el punto de mira logístico La logística y la cadena de frío son elementos críticos a la hora de garantizar la seguridad alimentaria, especialmente en un entorno globalizado donde los productos perecederos atraviesan múltiples eslabones antes de llegar al consumidor final. En este contexto, mantener la integridad de la cadena de frío no es solo una cuestión de cumplimiento regulatorio, sino un imperativo para prevenir riesgos a la salud pública y preservar la confianza en los productos alimentarios. José Castro, Operations Manager SOAPA Europa

RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx