Q96 - Tecnología y equipamento para la industria química

DIGITALIZACIÓN 51 Dicenque la automatizaciónabiertadehoynoes lo sufi- cientemente abierta. A su entender, ¿cómodebería ser? Los estándares abiertos permiten que sistemas y dispositivos se comuniquen entre sí y proporcionen datos que impul- sen la inteligencia y la automatización. Los estándares son la clave para desbloquear el flujo de datos, la innovación, la productividad, la eficiencia y el retorno de la inversión (ROI) en el sector industrial. Por eso creemos que la industria debe adoptar rápidamente estándares abiertos universales. Su introducción permitirá a los fabricantes de maquinaria, integradores y usuarios finales crear soluciones de automa- tización conectando las mejores aplicaciones y utilizando herramientas gráficas, que no requieren de código, habili- tadas por estándares como el IEC61499. La pandemia ha puesto en relieve algunos de los pro- blemas de nuestra industria. Como vicepresidente de la división de Industry de Schneider Electric, ¿cuáles cree que son las principales carencias de nuestro tejido industrial y cómodeberíanabordarseestas enun futuro? Es cierto que la pandemia ha supuesto un enorme reto, pero, eso sí, podemos decir también que ha sido un “catalizador forzoso” para que las empresas industriales que habían quedado más retrasadas en digitalización se hayan puesto al día finalmente. La necesidad de reducir la intervención de personas en las plantas ha acelerado la implementa- ción de la automatización y muchas empresas ya están adoptando herramientas que facilitan la monitorización y las operaciones en remoto. Las cadenas de suministro digitalizadas, por otra parte, también están mostrando una mayor resistencia ante el COVID-19. Las pymes son la columna vertebral de nuestra economía y debemos incrementar su competitividad para crecer de forma más sólida y sostenible. Y para ello las pymes deben invertir de forma inteligente basándose en una combinación de digitalización y ecosistema. Gracias a la digitalización podrán hacer más con menos y acceder a nuevos mercados, habilidades y herramientas. Pero para seguir creciendo necesitan trabajar en un ecosistema de partners vivo que les permita apoyarse en las áreas de experiencia del resto. Es decir, digitalizarse y también colaborar más para crear modelos de negocio más inno- vadores, rentables y sostenibles que permitan asegurar un crecimiento sostenible. ¿Cuán sensibilizados y familiarizados creen que están hoy nuestras empresas industriales con términos como IA, IIoT o Big Data? Hay segmentos de la industria que van más retrasados y otros que van más avanzados. En general, la industria sabe que tiene que aprovechar las diferentes tecnologías disruptivas que tenemos a disposición, lo más difícil a veces es analizar las necesidades, los objetivos y definir la estrategia, pero es lo primero que hay que hacer. A menudo se ha visto el coste de digitalizar y el conoci- miento tecnológico que requiere como barreras para la transformación, pero se puede comenzar poco a poco, con una prueba de concepto o de valor, es decir, no empezar con grandes inversiones, sino con pruebas de concepto que ayuden a visualizar de forma fácil los resultados que van a obtener con esa estrategia de digitalización. Hay que quitarse el miedo a cambiar porque en el entorno digital es posible avanzar rápido y de forma escalable sin grandes inversiones iniciales. ¿Qué les diría a aquellos que se resisten a implementar la tecnología y los avances de la Industria 4.0? Una industria que acomete una estrategia de transforma- ción digital puede pasar de estar en un entorno competitivo muy difícil a realmente posicionarse con un valor diferencial en el mercado de una forma rápida. Las nuevas tecnologías digitales les proporcionan mayores eficiencias, productivi- dad y sostenibilidad y les ayudará a reducir el coste general de producción. Por ejemplo, las soluciones EcoStruxure les permiten reducir cerca de un 30% de Capex y un 28% de Opex, incrementar en un 22% la disponibilidad de los equi- pos y reducir un 15% los problemas de calidad. De hecho, ahora mismo es más arriesgado no transformarse porque puede suponer que a largo plazo la empresa no sea sosteni- ble. Tenemos clarísimo que la digitalización de las empresas industriales y su sostenibilidad energética son la clave para que crezca todo el sector. EnEspaña y enEuropa se habla del valor añadido como baza competitiva frente a mercados asiáticos como el chino. ¿Es suficiente? ¿Lo será a medio plazo? ¿Con qué otras armas competitivas puede contar el fabri- cante europeo? Durante el siglo pasado puede decirse que la producción industrial de Europa gozaba de un gran reconocimiento dada la calidad de sus productos. La globalización y la apertura de los mercados internacionales provocaron la entrada de nuevos productores que durante este tiempo también han