Q107 - Tecnología y equipamiento para la industria química

56 MOVILIDAD necesario, sino también de la correspondiente refrigeración para que la batería siempre funcione en el rango de potencia óptimo. La gestión térmica se encarga, por ejemplo, de que mediante una combinación de bomba de calor y refrigeración puedan regularse temperaturas a través del agua de refrigeración. Las tuberías y líneas de plástico necesarias para ello están diseñadas en función de las correspondientes temperaturas y sustancias químicas. Algunas de las principales exigencias a estos materiales son, entre otras, la resistencia a las mezclas de agua/glicol y sal. Además, las tuberías deben poder soldarse y ser flexibles, ya que esto juega un papel esencial en la construcción de los vehículos. EJEMPLO DE PROPULSIÓN Otro de los ámbitos de aplicación importantes lo constituye la electrónica de potencia instalada entre el motor eléctrico y la batería de alto voltaje. En este ámbito, deben tenerse en cuenta propiedades eléctricas como la resistencia dieléctrica o la resistencia a la corriente de fuga. Además, en cierto modo también son relevantes tanto la conductividad térmica como la conductividad eléctrica o el apantallamiento electromagnético. Finalmente, varios de los materiales deben cumplir requisitos triviales como la protección contra las llamas y su propagación, preferiblemente sobre una base libre de halógenos. SIEMPRE EN EL PUNTO DE MIRA: LA SOSTENIBILIDAD Como en cualquier otro segmento, el segmento de la movilidad también está cada vez más marcado por la megatendencia de la sostenibilidad. Justamente por el hecho de que en los automóviles y otros vehículos se instalan muchos plásticos altamente especializados, que deben satisfacer requisitos especialmente altos, la búsqueda de soluciones que protejan los recursos es muy exigente. Sin embargo, los planteamientos surgen a lo largo de toda la cadena de valor, empezando por la producción de los materiales. Los productores y transformadores de plásticos ya están apostando en muchos casos por las energías renovables, como la energía solar, eólica o hidroeléctrica, para mantener lo más baja posible la huella de carbono. Las sustancias de partida también debe tenerse en cuenta. La lista de sustancias utilizadas en la fabricación, desde carbono renovable a biomasa pasando por materiales reciclados, no deja de crecer. Finalmente, otro de los aspectos esenciales es la trazabilidad en el ciclo de producción. Entretanto, son muchas las empresas que pretenden reciclar una gran proporción de las piezas usadas y buscan cada vez más plásticos que puedan reutilizarse más adelante. El objetivo es maximizar el ciclo de la sostenibilidad. Debido a su posición de interfaz entre los productores, otros responsables de la toma de decisiones y la industria manufacturera, distribuidores como Biesterfeld acompañan todo este proceso de valor añadido. Su cartera incluye múltiples materiales para todo tipo de aplicaciones que lo convierten en el socio ideal para desarrollos de productos cada vez más eficientes y sostenibles. EN BUSCA DE LA SOLUCIÓN ÓPTIMA JUNTOS Como parte de sus servicios, el distribuidor acompaña el desarrollo de nuevas aplicaciones y la optimización de aplicaciones ya existentes. Para ello, el distribuidor evalúa junto con el cliente los costes y beneficios, y formula recomendaciones independientes. La sostenibilidad siempre ha sido una parte integral de la empresa. Desde el desarrollo de herramientas y la optimización de procesos, hasta la selección de materiales, la sostenibilidad es lo más importante: tanto desde el punto de vista económico como ecológico. n

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