Un mercado TÉCNICO condicionado por el precio El crecimiento del mercado español de productos y sistemas antigraffiti es lento y gradual, y evoluciona en consonancia con la economía y la rehabilitación de edificios. Los aplicadores deben aumentar su nivel de formación y persuadir a la propiedad de la importancia de utilizar sistemas permanentes ntre las principales oportunidades del mercado de productos y sistemas antigraffitis se encuentran los proyectos para la rehabilitación de edificios y los planes locales de los ayuntamientos para mantener las ciudades limpias. Otro elemento positivo es que los pueden utilizar tanto los particulares como los profesionales de forma que con unos conocimientos técnicos adecuados se puede potenciar el uso de estos productos en las etapas iniciales de la construcción o de la rehabilitación. Y entre sus limitaciones se encuentra el precio de los productos bien elaborados y de calidad ya que mientras no sean más asequibles el mercado será reacio a introducirlos desde el principio. Los usuarios de los productos y sistemas antigraffitis son mayoritariamente los aplicadores profesionales, siendo los particurehabilitación SISTEMAS ANTIGRAFFITIS lares que los compran una minoría. Por lo tanto, también son el sector que más factura en este tipo de productos (frente a los particulares). Normalmente, para adquirir este tipo de productos, los profesionales suelen acudir a tiendas especializadas en pinturas mientras que los particulares se decantan por las grandes superficies del bricolaje. En el mercado de los sistemas antigraffitis se encuentran dos niveles de productos: los sistemas de limpieza y mantenimiento, más económicos y de menor eficiencia, y los sistemas de poliuretano de dos componentes de mayor coste y eficiencia. Por tanto, en función del sistema utilizado y las prestaciones requeridas, el producto que se debería utilizar varía generando la posible confusión del consumidor. Un operador comenta que se trata de un mercado todavía poco especializado que carece de sistemas que tengan ya cierta experiencia. Afirma que «los fabricantes de pinturas han tratado de acercarse a este mercado con variaciones de otros productos no pensados para tal fin y, claro, no acaban de funcionar». Por ello «el que hace un buen antigraffiti carece de un buen sistema de limpieza y mantenimiento, y viceversa, y al final el cliente queda insatisfecho». Y afirma que «hay pocos sistemas en el mercado español que funcionen». Este experto recuerda que «un producto no lo soluciona todo, ni a nivel de limpieza, pues hay múltiples tipos de sprays y pinturas cada vez más persistentes». Y «tampoco hay un solo protector antigraffiti que funcione sobre todos los tipos de base ya sean duras, blandas, absorbentes, pulidas, etc.». Explica, además, que «no creemos en los productos milagro porque siempre son necesarios sistemas». Y que de un sistema antigraffiti se espera «que la base quede limpia y protegida a largo plazo con el menor impacto visual y el menor coste de mantenimiento frente a nuevas pintadas». Otro especialista explica que «el usuario particular tiene tendencia a adquirir productos que sean de fácil aplicación y con un coste no demasiado elevado, obviando las verdaderas prestaciones que necesita». Este tipo de usuario no se para a contrastar la problemática que tiene con el tipo E mercados SÓLOPINTURA 22
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