Solo Pintura 39

ponencias ASEFAPI más de cada fabricante, de cuáles son sus al cliente una información que le permita valorar e identificar las preferencias o de qué tipo de pintura quiere fabricar. Se deben analizar los factores con los que juega cada fabricante, y con frecuencia los precios más elevados no implican una mejor calidad. calidades. Con ese fin, evalúan el nivel de las diferentes propiedades (cubrición, lavabilidad, etc.) de una pintura en una escala de entre una y cinco estrellas. Por otra parte, antes de iniciar un de mercado es interesante reunir una serie de información. En primer lugar, la que puedan facilitar los fabricantes a través de visitas para saber qué es lo que el mercado les demanda. El conferenciante aseguró que en sus últimas visitas a los productores, le comentaron que les estaban pidiendo pintura de muy baja calidad, y que «en muchas de ellas ni se ponía dióxido de titanio o bien, como mucho, se asustaba a la formulación con un poco de TÍO2». También hay estudio El conferenciante explicó que los dos estudios de mercado realizados en 2011 y 2013 les han permitido comprobar variaciones, en el mercado, tanto en las formulaciones como en el mercado. En primer lugar, se compararon los resultados de tres pinturas de alta calidad compradas en 2011 con tres compradas en 2013. Al tratarse del mismo que visitar las tiendas para saber qué es lo que perciben los dependientes y qué es lo que busca el cliente final. En algunas tiendas de Barcelona coincidieron en que las ventas al pintor profesional habían bajado mucho, mientras que las ventas a particulares se mantenían, mejor o peor, y en algunos casos incluso aumentaban. Este es un factor importante. El conferenciante explicó que para los consumidores particulares el problema radica en que «cuando van a comprar pintura tienen muy poca información a su alcance», y les resulta «muy difícil diferenciar la calidad de las pinturas con la información que encuentran en los envases». Así pues, mientras los profesionales cada vez compran menos volumen de pintura, están creciendo las ventas a unos particulares que, en realidad, tienen «unos criterios muy limitados a la hora de tomar sus decisiones de compra, y prácticamente no disponen de herramientas para poder preguntar e informarse». A modo de ejemplo, el ponente mostró una fotografía de un producto que «se parece más a un queso fresco que a una pintura». Pero explicó que muchos particulares la considerarían, erróneamente, una buena pintura «pensando que no es una pintura aguada sino, por el contrario, un producto cuyo fabricante le ha puesto mucha materia y de la que podrá obtener un mayor rendimiento». Tomás Tebar comentó que, en realidad, se trata de una pintura de muy baja calidad, con un poder de cubrición prácticamente nulo y muy mala resistencia al frote; pero que en el mercado «se encuentran este tipo de pinturas y además se venden...». El ponente comentó que existen fabricantes en cuyos envases se especifica si se trata de pinturas lavables o no, o bien que informan de que su rendimiento cubre un cierto número de metros cuadrados. Pero cree que esa información no es, en realidad, útil para el consumidor particular. Dijo que solo conocía un proveedor que empleaba un criterio sencillo para ofrecer producto y marca, y adquiridos en la misma tienda, se puede determinar si en esos dos años han cambiado. En segundo lugar, se compararon los resultados de 12 pinturas económicas (las marcas blancas y la línea económica de cualquier fabricante), e igualpinturas de alta calidad, el conferenciante afirmó que no se observan grandes diferencias, por lo que no parecía que los fabricantes estudiados hubieran variado la calidad en sus pinturas de gama alta. Pero si se atiende a su precio por litro (esas pinturas vienen en envases de cuatro litros) se observa que una de esas tres pinturas prácticamente había duplicado su precio en 2013 respecto al de 2011: «Es una política que ni siquiera en la propia tienda la entendían muy bien, pero que se ha dado, aunque no sabemos si es algo puntual o no». De las otras dos pinturas, una había bajado ligeramente el precio y la otra lo mantenía prácticamente igual. Acto seguido, el ponente se refirió a las pinturas económicas, cuyos precios oscilaban entre 1 y 3,80 euros / litro, y afirmó que se había producido un incremento de precios entre los años 2011 y 2013. Menos dos pinturas, todas las demás habían aumentado en mayor o menor medida su precio. En los parámetros técnicos, el poder de cubrición en seco también había aumentado. El subtono se mantuvo, en general, bastante estable, menos en un par de pinturas que en 2013 presentaban un subtono bastante más amarillento. Finalmente, el parámetro que sí ha empeorado, un -3%, es la resistencia al frote. En porcentajes, el precio había subido el 10%, el poder de cubrición en seco había aumentado el 7% y el subtono había crecido el 10%, pero eso básicamente es atribuible a las dos pinturas mencionadas. En consecuencia, ha bajado ligeramente la calidad de la pintura ya que han aumentado el poder de cubrición, pero se ha sacrificado el parámetro de resistencia al frote. A continuación, Tomás Tébar ofreció una visión general de la comparativa de pinturas en los estudios de 2011 y 2013. Se mostraron los precios de esos años, y los parámetros de poder de cubrición en seco, en aceite y de resistencia al frote. La comparación se dividió en marca blanca, con 7 pinturas en el primer estudio y 9 en el segundo, y en pinturas económicas, con 14 y 16 pinturas, respectivamente. Y se realizó la media de los dos. Curiosamente, ahora la comparación mostraba que el precio había bajado, a pesar de que antes el ponente afirmaba que había subido el 10%. Según el conferenciante, la explicación es muy sencilla. Las pinturas que se habían comparado antes, entre 2011 y 2013, eran las mismas pinturas y habían subido de precio. Pero en 2013, debido a la situación del mercado, se produjo la aparición de nuevas pinturas económicas y de precio inferior (mientras que en 2011 no había tanta variedad de pinturas económicas y de tan baja calidad). Así, en 2013 aumentó el número de marcas blancas y de pinturas muy económicas. El resultado es que las pinturas que ya se fabricaban en 2011 seguían teniendo la misma calidad dos años después pero eran un poco más caras. Mientras que los nuevos productos adquiridos en 2013 ya son más baratos, cosa que se nota más en las marcas blancas. En relación al poder de cubrición, en las pinturas económicas de 2013 se mantiene, si bien ha bajado un poco en las marcas blancas. mente se trató del mismo producto y marca procedentes de la misma tienda ya que «es necesario poder comparar manzanas con manzanas». En tercer lugar, se compararon las pinturas económicas y marcas blancas compradas en 2011, (21 pinturas) con las compradas en 2013 (25 pinturas). En este caso, se realizaron comparaciones entre algunos productos iguales, pero también de otros productos de diferentes fabricantes, o bien que son diferentes versiones de las pinturas. Y en ese caso, se pueden observar las medias de los diferentes parámetros a estudio. Comparativa de pintura Al observar la comparativa de los parámetros estudiados en las tres SÓLO PINTURA 23

RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx