26 Protagonistas Luis Javier Romero, presidente de ASAGUA Una de sus propuestas es desarrollar la colaboración público-privada. ¿Existen oportunidades para la inversión privada en el sector? ¿Hasta qué punto es un obstáculo la legislación actual? Siempre hemos defendido la necesidad de desarrollar la colaboración público-privada potenciando un marco normativo que la garantice; idea no secundada por el poder político y que ahora reivindica en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia como algo necesario para acrecentar la inversión, lo que es bueno. El punto 2.5.1 del Plan que habla de inversiones, señala: “El Plan de Recuperación contempla la movilización de inversión pública en el territorio nacional por 140.000 millones de euros hasta 2026 para llegar a impulsar hasta 500.000 millones de inversión privada”. Esta a rmación plantea el interrogante de si esto va a ser posible sin el desarrollo legal de este tipo de colaboración más allá de la cuestión de las concesiones. La aprobación del Reglamento de la Ley de Desindexación por Real Decreto 55/2017, supuso un duro golpe a este tipo de colaboración al limitar la rentabilidad del capital privado al rendimiento medio de la deuda del Estado a 10 años más 200 puntos básicos, cuando el retorno exigido en la actualidad por las inversiones en activos de infraestructuras es del orden del 6% al 7%. Es imprescindible modi car esta norma y desarrollar el marco legal para desarrollar esta clase de colaboración. Tanto este Gobierno como el anterior han expresado su intención de alcanzar el Pacto de Estado del Agua. Los partidos de la oposición también reclaman un acuerdo nacional en esta materia. ¿Cree posible alcanzarlo? ¿Qué importancia tendría un pacto de Estado en este momento? Para nosotros este pacto no se debió interrumpir. El Plan Hidrológico Nacional buscaba, a través de los cuatro ejes en los que se vertebraba, una gestión integrada e integral de los recursos hídricos, convencionales y no convencionales, presididos por el principio ineludible de la debida solidaridad entre las distintas regiones de España. En términos hídricos España es un todo holístico, una realidad distinta de sus regiones, por eso es importante trascender estas y actuar de forma integrada. Se trata de inventariar los recursos que existen y satisfacer las necesidades del conjunto, cuestión resoluble si se actúa con criterios técnicos. La aprobación del plan hubiera hecho posible, entre otras cosas, la implantación del regulador único y precios del agua sustentados por las mismas bases y, por tanto, su homogeneización. Desde ASAGUA consideramos imprescindible un Pacto nacional por el agua para evitar las guerras del agua y para su reparto solidario entre las distintas regiones de nuestro país. Por último, ¿cuál es el grado de internacionalización de las empresas del sector y particularmente de las asociadas a ASAGUA? ¿Cómo son percibidas nuestras empresas e ingenierías en el resto del mundo? El sector del agua español cuenta con excepcionales profesionales que, por su buen hacer, le han otorgado un gran prestigio a nivel internacional. Aunque la vocación internacional ya existía, debido a la menguada inversión habida en la última década las empresas se vieron obligadas a buscar negocio fuera, desarrollando una gran cartera, alcanzando el éxito y logrando una gran experiencia y reconocimiento
RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx