FERIAS Una feria BAJA en CALORÍAS a feria Domotex 2019 tuvo lugar entre el 11 y el 14 de enero en Hannover. Deutsche Messe informó que más de 1.400 expositores procedentes de sesenta países participaron en el certamen. Además, asegura que se aumentó el espacio de exhibición vendido en relación a 2017, que fue la última edición celebrada en año impar y en que Domotex también coincidió en fechas con BAU, la gran feria alemana de la construcción que se celebra en Munich con periodicidad bianual. Los organizadores reconocen que se registró un «ligero descenso» de visitantes, que atribuye a la concentración del mercado. Pero destacan que el 90% de los profesionales que acudieron a la feria disponían de una elevada «autoridad», es decir, de capacidad de decisión en sus empresas. E incluso que «aumentó el volumen de compras por visitante». Si bien la gran mayoría de los visitantes eran mayoristas y minoristas, aumentaron los arquitectos e interioristas. El 70% de los asistentes procedía del extranjero, Si bien el «pulso» de la feria fue el habitual en la mayoría de los pabellones de Domotex (que se centran en los pavimentos textiles: alfombras hechas a mano, alfombras confeccionadas a máquina, moquetas…), este año la coincidencia con BAU tuvo un impacto más fuerte que nunca en los pabellones dedicados a los suelos de madera, laminados, vinílicos y sus complementos. En realidad, el efecto fue aún más llamativo por el agudo constraste con la pasada edición de 2018, que en los pabellones «no textiles» fue realmente espléndida. Este año tanto el pabellón 12, dedicado a los fabricantes de pavimentos y revestimientos, como el 13 ocupado mayoritariamente por fabricantes de barnices, adhesivos, terminaciones y maquinaria, tuvieron que «recortar» su espacio de exposición DOMOTEX 2019 ofreció su cara más dual. La normalidad de la mayoría de los pabellones, dedicados a los revestimientos textiles, contrastó más que nunca con la alicaída imagen de los pabellones que exhiben los suelos de madera, laminados, vinílicos y sus complementos. La ausencia, en bloque, de los grandes fabricantes multiproducto europeos este año impar (en que la feria coincide con BAU) dejó un vacío imposible de llenar... previsiblemente hasta que abra sus puertas Domotex 2020 en un 30%. Por descontado, la presencia de visitantes también fue sensiblemente menor. En el pabellón 9, que con la reestructuración del espacio expositivo estrenada el año pasado debe ser el «epicentro» de la feria y un privilegiado escaparate de la innovación y las nuevas tendencias, prácticamente solo había un proveedor importante de revestimientos no textiles, la empresa de parquets holandesa Fetim, cuando el año pasado estuvieron presentes Faus, Forestry e Yvyra, entre otros. También aquí se tuvo que reducir el espacio ferial. La razón de esta imagen descafeinada de los pabellones no textiles es sencilla. Los grandes fabricantes europeos de pavimentos laminados o de suelos vinílicos, muchos de los cuáles ya son productores multicategoría, y que son los que ocupan las grandes stands siempre concurridos, simplemente no comparecieron a esta edición de Domotex. Y muchos de sus clientes tampoco visitaron la feria. Entre los ausentes se cuentan compañías que participaban de forma regular en Domotex todos los años, con BAU o sin BAU. La única excepción remarcabale fue el grupo Krono Swiss, que mostró una imagen unitaria sin representación de sus conocidas fabricas y marcas Kronospan, Kronoswiss, Kronotex y Kronopol. Tampoco acudieron a su cita con Domotex algunos de los principales productores de parquet europeo, aunque en general la madera estuvo mucho mejor representada por firmas medianas y algunas marcas de productos exclusivos, en línea con lo que tradicionalmente ha ocurrido los años pares en que la feria coincide con BAU. Lo mismo puede decirse de los fabricantes de productos afines al parquet (aceites y barnices, adhesivos, terminaciones, maquinaria), sobre todo de las marcas no alemanas. L 30 - PAVIMENTOS
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