14 SEGURIDAD VIAL INFANTIL retención infantil’, cuyos responsables son Juan José Alba, profesor del departamento de ingeniería mecánica de la Universidad de Zaragoza, y Joan Forrellad, responsable de I+D y del Crash Test Center de Jané España. Ambos expertos son referentes en el sector y forman parte de la Junta Directiva de AESVi. Este informe realizado por AESVi es el primero de estas características que se realiza a nivel europeo. El informe está centrado en los SRI de segunda mano, más que en los dispositivos usados o con muchos años de antigüedad. Esto es así porque se debe diferenciar entre ambos tipos de silla auto. Un dispositivo antiguo, pero bien guardado y conservado en casa puede ser válido para un segundo hijo. Por el contrario, una silla usada comprada en el mercado de segunda mano y sin un conocimiento exacto de su historia, puede suponer arriesgarse a “ jugar a la ruleta rusa” con la seguridad del niño que la utilice en el caso de que se produjese un accidente o siniestro vial. El estudio realizado por AESVi se llevó a cabo en el laboratorio Applus+ IDIADA, y en la investigación se analizaron diez sistemas de retención infantil comprados de manera aleatoria en portales de internet dedicados a la venta de segunda mano. Las diez muestras fueron examinadas por la misma normativa con la que fueron homologadas y se comprobó su efectividad en un ensayo dinámico de impacto frontal, según describe el ReglamentoEuropeo para sistemas de retención infantil. Los resultados de los ensayos mostraron que ninguno de los sistemas de retención infantil analizados en las condiciones que presentaban cada uno de ellos cuando fueron adquiridos en el mercado de segunda mano, pasaría las pruebas de homologación actuales. Este hecho demuestra la urgencia de establecer una nueva normativa que garantice la seguridad y los derechos del consumidor que adquiere este tipo de dispositivos de seguridad infantil en el mercado de segunda mano. Protocolo de selección y ensayo Para llevar a cabo esta investigación científica, AESVi realizó la compra aleatoria de 10 sillas auto en una plataforma online de venta de productos de segunda mano. Cada una de las muestras procedía de distintas zonas de España. Para seleccionar las muestras se estableció un criterio de rango de 0 a 18 kg de peso o desde el nacimiento hasta 105 cmde altura, es decir, sillas equivalentes a los Grupos 0, 0+ y/o 1 que son las específicas para el grupo de usuarios más sensible: niños de 0 a 4 años aproximadamente. La compra de cada sistema de retención infantil de segunda mano fue registrada ante Notario, y en el momento de la compra se desconocía la antigüedad de cada silla. El estudio de crash test fue realizado por el laboratorio Applus+ IDIADA que desembaló y documentó cada muestra antes y después del ensayo. En el laboratorio de ensayos se ocultaron todas las marcas y rasgos identificativos de las sillas, y se documentó el país de origen de la homologación de cada silla: Francia, Alemania, Luxemburgo, Países Bajos y España. Se clasificó y se documentó cada muestra para detectar la presencia o ausencia de instrucciones de uso, etiquetas, etc. Cada muestra se clasificó según el Reglamento Europeo con el que fue homologada para realizar los ensayos dinámicos de acuerdo con dicho Reglamento. Al tratarse de muestras únicas solo podía realizarse un único test por cada silla. El laboratorio escogió la prueba más representativa, una prueba de choque a 50 km/h, la más exigente dentro del proceso de homologación de todas las muestras. Los dummies empleados en las pruebas fueron de la Serie P ya que todos los SRI utilizados como muestras habían sido homologados según la normativa europea R44 y, por tanto, con esta misma familia de dummies. Conclusiones del estudio • 9 de cada 10 sillas compradas en el mercado de segunda mano no pasarían hoy las pruebas dinámicas con las que fueron aprobadas en su día para cumplir el Reglamento Europeo de seguridad. • 8 de las 10 sillas infantiles de segunda mano analizadas en el estudio no cumplirían con los requisitos de documentación necesaria para asegurar su correcta instalación. • Utilizar una silla auto adquirida en el mercado de segunda mano compromete la seguridad de los niños en caso de accidente. • La falta de regulación del mercado de sistemas de retención infantil de segunda mano supone un gran riesgo para la seguridad de los menores que los utilizan. • AESVi solicita la prohibición de la venta de sillas auto de segundamano hasta que exista una regulación que garantice los mínimos de seguridad exigidos por el Reglamento Europeo. • AESVi insta a las Administraciones a mejorar la pedagogía de la seguridad de los pequeños en sus desplazamientos en carretera y a una mayor información acerca de los diferentes dispositivos de seguridad infantil en el automóvil. n Los sistemas de retención infantil son el elemento fundamental para la protección de los menores en el interior del vehículo C M Y CM MY CY CMY K
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