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ENTREVISTA "Es necesario que se impulse un cambio de políticas, leyes y mentalidades en favor de la natalidad, con medidas de apoyo económico a los padres, por ejemplo" 54 Carmina Meneses “El principal reto es que la sociedad sea consciente de que no puede seguir con tan pocos niños” JOAQUÍN LEGUINA, DIRECTOR DEL OBSERVATORIO DEMOGRÁFICO CEU Desde 2008 hasta 2020, los nacimientos han caído un 35% en España, y un 38% en el caso de las madres españolas. Una gran pérdida en pocos años, y la fecundidad de las mujeres españolas tocó en 2020 su mínimo histórico: 1,12 hijos por mujer. Un índice de los más bajos del mundo. A partir de las valoraciones de Joaquín Leguina, director del Observatorio Demográfico CEU, analizamos la evolución de la natalidad en los últimos años. Si le preguntamos a Joaquín Leguina, director del Observatorio Demográfico CEU, cuáles son los principa- les motivos del descenso de la natalidad en nuestro país, deta- lla principalmente que “por una parte, está la caída continua de los nacimientos desde 1977 hasta finales de los 90; ahora cada año hay menos mujeres en edad fértil, y eso, por sí solo, para una misma tasa de fecundidad, lleva a que cada año nazcan menos niños. Además, está cayendo el número medio de hijos por mujer, algo que a su vez obedece a muchas sub- causas, que vienen de antaño. Esas sub-causas, a riesgo de simplifi- car, proceden sobre todo de una principal: la tremenda desvalorización social y legal que ha experimentado la maternidad/paternidad. También se tienen menos niños ahora que antaño por el descenso casi a cero de la mor- talidad infantil y juvenil, pero eso sería inocuo si la tasa de natalidad solo hubiera caído lo mismo que la de mortalidad de niños y jóvenes. El problema es que la fecundidad se ha reducido mucho más que la mortalidad desde finales del siglo XIX”. Concretamente, ¿cómo ha afec- tado la pandemia del Covid-19 a la natalidad? En diciembre y enero de 2021 hubo descensos en picado en el número de bebés, por el pánico de nueve meses antes, con el comienzo de la pandemia. Pero tras esos dos meses ‘de plomo’, parece que se está