PK163 - Puericultura Market

15 INFORME: VIAJAR CON EL BEBÉ Respecto a los detallistas especializados, Ingrid Puig, pro- pietaria de Bitti (Barcelona), destaca que “los fabricantes concentran sus esfuerzos en varios aspectos, destacando la seguridad del bebé. No solo tienen en cuenta carcasas con materiales de alta calidad que aguantan los impactos, sino también los sistemas de sujeción que minimicen la posibilidad de colocar al bebé de forma incorrecta. Además, se está invirtiendo en sistemas de instalación que sean intuitivos y fáciles de utilizar para evitar al máximo los erro- res”. Y, Ana María Romero, gerente de Paranenasynenes (Trebujena, Cádiz), explica que “la apuesta mayoritaria por parte de la industria está dedicada principalmente a las sillas i-Size. Los últimos grupos que se han sumado a esta categoría son el 2 y 3 i-Size, ofreciendo así una línea de seguridad continua desde el nacimiento”. SEGURIDAD Y CALIDAD DEL PRODUCTO, FACTORES INDISPENSABLES La seguridad es la principal premisa que tienen en cuenta los padres a la hora de adquirir una silla auto, aunque sea inevitable también ajustarse a un presupuesto (pero sin ser el precio, normalmente, el indicador principal). Los padres actuales cada vez están más concienciados con la protección de sus hijos y buscan la seguridad, la marca y la recomendación del vendedor. De esta manera, el asesoramiento personalizado sigue siendo muy determi- nante en las compras que se realizan en la tienda física. Para Sara Rojas, trade marketing manager Iberia de Dorel Juvenile, “los consumidores buscan que el producto lo tenga todo: marca, calidad, seguridad, precio… Normalmente, los padres se han informado previamente antes de ir a la tienda sobre lo que buscan, y el precio suele ser impor- tante, aunque la seguridad (y los resultados de los tests) marcan mucho la elección final de una silla auto”. Por su parte, Nacho Barraquer, director comercial de Jané Group, detalla que “si buscan un SRI para el vehículo principal, en ese caso el consumidor prioriza la seguridad y la calidad por encima del precio. En cambio, para un segundo o tercer coche, el precio suele ser la variante predominante en la toma de decisiones”. Mientras que Javier Castillo, responsable de producto de Casualplay, explica que “la decisión final viene determinada por una suma de factores, que encabeza la calidad y prestaciones de la silla auto, y que se procura enca- jar con el presupuesto destinado a la compra. Si la compra se realiza en una tienda física, la recomendación del ven- dedor tiene un peso específico muy importante”. A lo que Ingrid Puig, propietaria de Bitti (Barcelona), añade que “nues- tro consumidor valora la seguridad, el confort y la facilidad de instalación que ofrecen las marcas. La seguridad en el automóvil nunca es un gasto, siempre es una inversión. Tú EFECTIVIDAD DE LA CONTRAMARCHA La tendencia de adquirir una silla auto a contramarcha crece año tras año, sobre todo en la franja de edad de recién nacido hasta los 4 años aproximadamente. Para Ibon Maza, director de comunicación de Babyauto, “el uso de los SRI a contramarcha hasta los 18 kg ha supuesto un salto cualitativo en las sillas auto, al permitir una posición mucho más segura en las primeras etapas de crecimiento. Las ventajas en caso de sufrir un impacto a contramarcha son obviamente muy superiores a ir de frente a la marcha, ya que no hay duda que las sillas a contramarcha son las más seguras como mínimo hasta los 4 años”. Según Javier Carmona, director comer- cial/jefe de producto de Baby Monsters, “nosotros siempre apostamos por las sillas a contramarcha y siempre apostaremos por ellas, indiferentemente de qué normativa cumplan. Lo más importante es que los padres acudan a un establecimiento especializado porque cada niño, cada automóvil y cada SRI son diferentes, y no todo le va bien a todo”. Por su parte, Philippe Darmigny, country manager Spain & Portugal de Columbus Trading Partners, explica que “el consumidor en general está cada vez más sensibilizado y más informado res- pecto a las normas de uso de las sillas auto, sobre todo en el caso de los más pequeños. Por lo tanto, los padres saben que tienen que empezar con una silla instalada en el sentido contrario a la marcha. Sin embargo, sigue habiendo muchas dudas en cuanto a la edad ‘máxima’ de uso de las sillas auto en esta posición. La primera silla auto que se compra siempre es en sentido contrario a la marcha, con o sin posibilidad de uso a favor de la marcha, y la siguiente suele ser una silla auto a favor de la marcha”. Mientras que Joan y David Font, adminis- tradores de Font Espasa (Lleida), explican que “en cuanto a la contramarcha, el rango más demandado es el obligatorio hasta los 15 meses, pero los padres cada vez más demandan una silla auto que pueda ir a contra- marcha hasta los 4 años o incluso hasta los 6 años”. Y, Nuria Guedes, gerente de Pinponbebés (Las Palmas de Gran Canaria), detalla que “el principal interés de la contramarcha se centra hasta los 4 años, después de esta edad el porcentaje es mucho más bajo. Las sillas auto más demandadas son las multigrupos i-Size por tres motivos claves: seguridad, precio y amortización, y más en tiempos tan difíciles económicamente hablando”.

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