PK158 Puericultura Market 158

INFORME ESPECIAL: VIAJAR CON EL BEBÉ 14 cuando se hace más importante la labor del punto de venta, que conoce las diferentes marcas y sillas y, tras probar diferentes opciones, recomiendan la mejor silla auto para cada familia”. Por su parte, Philippe Darmigny, country manager de COLUMBUS TRADING PARTNER, asegura que “los padres están muy informados, pero sigue habiendo mucha confusión. El sector tampoco ayuda con dos normativas vigentes de forma paralela. No saben muy bien hasta qué edad los niños tienen que ir en el sentido contario a la marcha, tampoco saben exactamente cuándo cambiar de grupo, si guiarse por el peso o por la altura del niño… Todo esto resulta con- fuso y da pie a cualquier interpretación”. Y Alicia Ortega, directora de marketing de ARTSANA, resalta que “tienen mucha información, pero, en ocasiones, siguen confun- didos por las diferentes normativas, lo que realmente se ajusta a su vehículo, su estilo de vida… y es ahí donde el asesoramiento del vendedor resulta fundamental”. Segunda mano y ventas online, menos representativo Como ya hemos comentado anteriormente, la venta online, el préstamo y la segunda mano en esta categoría no tienen tanto peso como en otros segmentos del sec- tor de la puericultura. Aun así, son hábitos de consumo muy instaurados en la sociedad, que crecen constante- mente. Respecto a la venta online, los mayores peligros que presenta es que no siempre se tiene la garantía de que se está comprando la silla auto correcta (ni para el niño ni para el vehículo), además que no se sabe si se ha ins- talado correctamente en el automóvil. Los profesionales destacan que una de las prácticas más utilizadas por los consumidores que buscan precio, ante todo, es visitar la tienda, obtener toda la información necesaria (ver y probar el producto) para luego hacer la compra online si el precio es más económico. Así lo especifica Mónica Gómez, gerente de Maxibebé (Barcelona), “sí se com- pran sillas auto en internet, buscando el precio, pero previa información en las tiendas físicas. Por lo tanto, las consecuencias son negativas para las tiendas que invierten tiempo y dinero en su asesoramiento. Debería haber una política de colaboración activa entre marcas y tiendas físicas, ya que somos las que proporcionamos la información fiable al consumidor”. A lo que añaden Joan y David Font, administradores de Font Puericultura (Lleida): “las ventas online también están creciendo en esta categoría, aunque el porcentaje sea más bajo. Las consecuencias pueden ser letales porque la instalación de una silla auto es muy importante, ya puede ser la más segura del mercado que, si no está bien instalada, no sirve de nada”. Por parte de los fabricantes/distribuidores, des- tacamos valoraciones como la de Nacho Barraquer, director comercial de JANÉ, que explica que “cada vez más se compran sillas auto a través de internet. Las consecuencias son que el canal especialista físi- co está ofreciendo cada vez más este servicio online con la misma calidad de servicio que en la tienda fí- sica, cerrando una venta online que se inició en una prescripción en tienda física. Si el consumidor final compra online solo por precio, el futuro de los avan- ces de seguridad se verá afectado dado que dichos avances requieren una gran inversión en investigación y desarrollo”. Mientras que Josep M. Vallès, CEO de SMART BABY, detalla que “en nuestro país, la venta por internet todavía está muy lejos del resto de Euro- pa, pero poco a poco la venta va subiendo. Comprar La contramarcha, valorada entre los padres La tendencia de adquirir una silla auto a contra- marcha crece año tras año, sobre todo en la franja deedadde reciénnacidohasta los4añosaproxima- damente. Las ventajas en caso de sufrir un impacto a contramarcha son obviamente muy superiores a ir de frente a la marcha, ya que no hay duda de que las sillas a contramarcha son lasmás seguras, como mínimo hasta los 4 años. Para Juan José Pérez, ad- ministrador de Macro Bebé (Alcalá de Henares, Ma- drid), “cada vez hay más información al respecto y, en consecuencia, son más demandadas. El rango de edad de uso se sitúa desde el nacimiento hasta los 6 años, aunque lo más normal es que se utilice hasta los 4 años”. Mientras que, para Javier Castillo, responsable de producto de PLAY GROUP, “junto a la palabra i-Size, contramarcha es la otra palabra clave que muchas familias utilizan cuando buscan una silla auto. Básicamente, los padres demandan más el uso a contramarcha en el primer tramo de edad, de 0 a 4 años”. E Ibon Maza, director de co- municación de GRUPOBABYAUTO, destaca que “el uso de las sillas auto a contramarcha hasta los 18 kg ha supuesto un salto cualitativo, al permitir una posición mucho más segura en las primeras eta- pas de crecimiento. Las ventajas en caso de sufrir un impacto a contramarcha son obviamente muy superiores a ir de frente a la marcha, ya que no hay duda de que las sillas a contramarcha son las más seguras como mínimo hasta los 4 años”. n

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