Revista Puericultura Market 149

NUESTROS ESPECIALISTAS www.puericulturamarket.com | 87 Adoctrinados La televisión se ha encargado de adoctrinar al consumidor con eslóganes como “yo no soy tonto” o “si pagas más es por- que quieres”, y la simple compra de un producto se ha conver- tido en una auténtica odisea de comparativas. Hay tanta ofer- ta y tantos precios que el cliente se pierde en este inframundo, tomando la compra como algo casi personal y sintiéndose ofendido si en tu comercio ve un precio más alto. Perdona, pero los detallistas trabajamos con tarifas con las que el fabricante fija un precio y que nosotros respeta- mos, y que al final es lo que vale ese producto, que lleva en esa etiqueta un montón de cosas que no ves y por lo visto tampoco valoras. En ese precio está metido mi tiempo, el alquiler del local, la luz, el agua, el teléfono, las basuras, los impuestos, la seguridad social, el dar vida a esta calle, el crear dos puestos de trabajo, el cariño con el que se escoge cada producto de la tienda, la explicación que te doy sobre él, mi formación, los viajes que tengo que hacer a ferias, el intentar estar siempre en vanguardia y, sobre todo, el que te guste tu trabajo y lo hagas con cariño. Y aun así, dando todo tu empeño en hacer bien tu tra- bajo, me viene una clienta a la que le vendí un flexo para sombrilla que, tras un uso inadecuado, al cabo de una semana aparece por la tienda hecha un basilisco porque dice que le he roto el coche. Ha estado manipulando el flexo vete a saber cómo y ha rayado todo el chasis, y aho- ra me presenta una reclamación en consumo diciendo que yo le puse el flexo, que ella no lo ha tocado en este tiempo (cosa imposible, ya sabemos que un flexo hay que manipularlo continuamente) y me reclama más de 400€ por daños. Y, aparte del disgusto, ahora tengo que ir yo a consumo a realizar un arbitraje de algo que está claro que yo no he causado…En fin, ¿a nosotros quién nos defiende? ¿Los detallistas no tenemos derechos? Estos episodios te dan ganas de mandar todo al cuerno. Si yo compro un coche en el concesionario y al ir aparcar lo rayo contra la pared, no se me ocurre ir a la tienda a re- clamar. Pero aquí sí vienen a reclamar todo tipo de cosas, es increíble. Si fuerzas una cosa y produces daños, yo no soy responsable de tu mal uso. Hay algunos clientes que parecen estar en un estado de defensa total y se toman estos temas como algo personal, es algo increíble. Más consciencia en el consumo -Luego preguntan por qué cierran las tiendas-. En el plan que están algunos clientes, quizá acabaremos comprando hasta el pan por Internet. No sé cómo acabará toda esta co- rriente. ¿Nos traerá Amazon el pan en un dron? No sé qué nos deparará el futuro, pero se nos está yendo de las manos. Está claro que en el mundo de la puericultura, pocos ar- tículos hay de fabricación nacional que podamos comer- cializar, pero hay un amplio abanico de artículos que sí lo son. Yo no me canso de decir que los zapatos que vendo se hacen en Villena, que mis sacos de silla se fabrican en Galicia o en Cataluña o que la ropa es de tal localidad. Defiendo estos productos porque están bien hechos y es más justo consumir lo de casa, pero parece que al cliente actual todo esto le da igual, solo quiere tener el mejor pre- cio a cualquier coste. No le importa cargarse el comercio de barrio, cargarse la fabricación, cargarse, en resumen, el crecimiento de un país. Solo mira ahorrarse unos euros, pero, ¿A qué coste? ¿Estamos valorando el impacto futu- ro que tendrán los nuevos hábitos de consumo? Deberíamos ser más conscientes, no solo con las bolsas, sino también con el consumo en general. Consume local, riega tus plantas, da vida a tu entorno, colabora con las familias que han apostado por abrir cada día esa persiana que a veces nos quita el sueño. Yo procuro comprar todo lo que puedo en negocios locales, ¿y tú? ¿Te has parado a pensar con quién contribuyes comprando en las grandes superficies o a grandes corporaciones on-line? n Beatriz Colina Gerente de Amatxu Denda (Bermeo, Vizcaya)