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TRIBUNA DE OPINIÓN 40 Deseamos presentaros el trabajo que desarrolla la Fundación Pondera desde su ámbito de relación con las empre- sas. Esta función de servir como hub a las organizaciones, permite a nues- tra organización presentar un plan de desarrollo y acompañamiento para la identificación de los puntos fuertes y débiles de éstas en la concreción de una ética alineada con los plantea- mientos de Naciones Unidas. Así como de las políticas marco referenciales de cada país, cada comunidad o región, cada localidad concreta. El Foro de Expertos del Ministerio de Trabajo afirma que “la responsabilidad social de la empresa es, además del cumplimiento estricto de las obliga- ciones legales vigentes, la integración voluntaria en su gobierno y gestión, en su estrategia, políticas y proce- dimientos, de las preocupaciones sociales, laborales, medioambientales y de respeto a los derechos humanos que surgen de la relación y el diá- logo transparentes con sus grupos de interés, responsabilizándose así de las consecuencias y los impactos que se derivan de sus acciones.” “La integración voluntaria, por parte de las empresas, de las preocupaciones sociales y medioambientales en sus operaciones comerciales y sus rela- ciones con sus stakeholders” nos da una definición concreta de lo que es la Responsabilidad Social sin apelli- dos acorde a lo definido en el Libro Verde de 2001 de la Unión Europea. La Responsabilidad Social sin apellidos: un compromiso de todos De izquierda a derecha: Francisco Javier Valbuena Ruíz, presidente de la Fundación Pondera, y Joaquín Fernández, CEO de Jofemesa. Dentro de su política de Responsabilidad Social Corporativa, Jofemesa tomó hace unos meses la decisión de ayudar a la Fundación Pondera para seguir creciendo y ofrecer su máximo apoyo a la transformación que desarrolla en varios países de África y América. A través de este artículo, el presidente de la Fundación Pondera, Francisco Javier Valbuena Ruíz, agradece a Jofemesa su colaboración con esta entidad, profundiza en la cada vez mayor importancia de la RSC y detalla alguno de los proyectos solidarios en los que ya está trabajando la Fundación. La Fundación Pondera opera desde 2019; está presente en el Hospital de Notre Dame de la Santé, en la ciudad de Dschang, Camerún; y en los hos- pitales de Kafakumba y Kanzenze, en la República Democrática del Congo. La situación dramática, los cuidados perinatales, el límite de las 48 horas en neonatos y el cuidado a madres tras el parto —con una ratio elevada de muertes por septicemia—, hacen de nuestro trabajo una urgencia y un deber. También con presencia en proyec- tos en el continente americano, en concreto de la República de Ecuador, con asistencia a programas de desa- rrollo ecoturístico y de indigenismo en la provincia de Chimborazo, en la provincia de Santa Elena; y en el Vicariato Apostólico de Aguarico, en el Hospital Franklin Tello. Nuestra presencia en este territorio próximo a Francisco de Orellana-Coca, en el corazón de la Amazonía, garantiza la supervivencia y sostenibilidad de al menos 9.000 indígenas de diferentes etnias o nacionalidades. En la Fundación Pondera aunamos talento para desarrollar las capacida- des de entidades con elevado impacto social, principalmente hospitales. La gestión es una gran olvidada en la cooperación, en cambio es impres- cindible para garantizar servicios eficientes y sustentables. La inversión en gestión redunda en un impacto social colosal en entornos muy vul- Por Francisco Javier Valbuena Ruiz, presidente de la Fundación Pondera