62 CONGRESO ASEFAVE sas pudieran acercarse a los centros formativos o a ferias de formación profesional para captar estudiantes. FALTA DE ESPECIALIZACIÓN Sin embargo, uno de los problemas de los que adolece la formación destinada al mundo profesional es la falta de especialización. “La formación no se adapta a la demanda de las empresas -afirmó Inmaculada Jiménez-, los títulos son demasiados generalistas. Se han hecho propuestas al Ministerio de Educación para emprender ciclos más especializados. Si conseguimos que el alumnado encuentre un buen sitio donde trabajar, con una buena formación práctica, luego tendrá tiempo para aprender el oficio en la propia empresa”. Desde su experiencia, Carlos Gabriel Ruiz expresó que el Máster en Fachadas Ligeras es una solicitud de las propias empresas. “Cuando surgieron estos estudios solo había cuatro similares en toda Europa. Ahora existe alguno más, pero no existe mucha más demanda”. También señaló que es necesario diferenciar entre los estudios de grado de arquitectura clásicos y los postgrados específicos. Centrándose en el ámbito de la fachada “aquí también falta especialización. Los títulos generalistas no son suficientes para todo el sector. La formación de postgrado debe ser distinta e impartida por un profesorado que esté especializado. Aquí la colaboración de las empresas es fundamental. En el MFL, todo el profesorado y los contenidos están vinculados al sector, pero deben ser las propias empresas las que nos dirijan hacia qué tipo de formación debemos impartir”. Ferney Ruiz indicó que, para vincular a las empresas con la formación, desde Asetub se ha impartido una formación especializada en tuberías plásticas y los profesionales que la superen obtendrán un carnet profesional acreditativo. “Los profesionales que necesiten esa acreditación deberían poder obtenerla tras cursar un módulo de algún ciclo formativo”. SOLUCIONES PARA LA FORMACIÓN Para concluir la mesa redonda se pidió a los participantes que expresaran cómo, en su opinión, se podría mejorar la experiencia formativa profesional. Norma Marco apuntó que sería importante estrechar la colaboración con las empresas en la formación dual, “sobre todo en tres ámbitos: generando vínculos para formar a formadores y a alumnos, a través de ‘micropíldoras’ sobre productos de construcción y facilitando el acceso de alumnos a prácticas. Finalmente, también se puede colaborar con recursos, cediendo, por ejemplo, materiales con los que las escuelas puedan realizar prácticas”. Por su parte, Inmaculada Jiménez indicó que sería necesario crear “nuevos ciclos formativos que contemplaran dos años de formación teórica en un centro y nueve meses de prácticas en empresas. El alumnado demanda formación práctica. El objetivo es conseguir, en esos dos años teóricos, el mejor alumno para la empresa y la mejor empresa para el alumno”. PERFILES QUE DEMANDARÁ EL SECTOR DE LA ENVOLVENTE En la sesión del 24 de noviembre, dentro del área temática dedicada a la formación, participaron cuatro ponentes: • Ignacio Fernández Solla, director de Arup. • José Manuel Torres Malanda, de Soudal Química. • Dr. Luis A. Martínez, consultor y formador de Passivhaus Consultores. • Carlos Gabriel Ruiz, profesor del Máster de Fachadas Ligeras de UPV-EHU. El primero en intervenir fue el director de Arup, con su ponencia ‘Qué perfiles demandará el sector de las envolventes en 2030’. En su intervención explicó que el World Economic Forum previó el pasado abril que la adopción de nuevas tecnologías será “el factor crucial en la transformación de los negocios y que la mayor creación de puestos de trabajo se deberá a evoluciones medioambientales y tecnológicas”. Asimismo, las tecnologías más relevantes serán el big data, la inteligencia artificial y la ciberseguridad. Ignacio Fernández Solla afirmó que se prevé, de aquí a 2028, en el sector Ignacio Fernández Solla, de Arup.
RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx