68 ANTIPARASITARIOS Son numerosos los parásitos externos que pueden afectar a nuestras mascotas. Estos ectoparásitos pueden causar enfermedades a los animales que parasitan, como la dermatitis alérgica a la picadura de pulgas y, además, algunos son vectores de enfermedades parasitarias e infecciosas que afectan a perros y gatos, siendo algunas importantes zoonosis (ej. Leishmaniosis). Por tanto, el uso de antiparasitarios externos es fundamental para prevenir enfermedades, promover el bienestar animal y proteger la salud humana. Los ectoparásitos se dividen en ácaros, garrapatas e insectos tales como pulgas, piojos, flebótomos, mosquitos y moscas, y su presencia está determinada por la biología del propio parásito, la presencia de otros hospedadores para completar el ciclo biológico y las condiciones medioambientales. En los últimos años, debido al cambio climático, se ha producido un incremento de temperaturas, lo que ha permitido que los parásitos externos amplíen su actividad en algunas regiones geográficas durante periodos más prolongados, o emerjan en zonas donde hasta ahora no era habitual su presencia. Por ello, es importante tener en cuenta algunas consideraciones para cada uno de ellos. “Los tratamientos antiparasitarios siempre deben realizarse bajo prescripción veterinaria y de forma individualizada según el riesgo de exposición” LA IMPORTANCIA DE LA PREVENCIÓN FRENTE A LOS ECTOPARÁSITOS Ana Montoya, doctora en Veterinaria por la Universidad Complutense de Madrid.
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