mercados «Aunque estéticamente las ollas a presión no han introducido grandes cambios, sí los hay en su funcionamiento y equipamiento. Ahora son más fáciles de abrir y cerrar y más seguras, dos aspectos que centran la inversión de las marcas» El ahorro de tiempo y de energía es el principal argumento de venta de las ollas a presión; pero hay muchos más: conservan mejor los olores, sabores y propiedades nutricionales de los alimentos. Por ello, podríamos decir que este utensilio logra una especie de fast food saludable, para quien dispone de poco tiempo para dedicar a la cocina y no por ello quiere renunciar a comer de modo sano. Aunque no sea un producto con grandes volúmenes de ventas, el mercado de las ollas a presión ha conseguido mantenerse estable incluso en tiempos de crisis y ahora apunta hacia un alza. Este producto goza de un público fiel, que aprecia sus ventajas, y está ganando poco a poco nuevos clientes. ¿Cómo se ha conseguido ensanchar esta base de clientes fieles? Explorando las tecnologías 2.0, captando a los sectores más preocupados por la salud o sacando el máximo provecho al ahorro de tiempo y de energía. Las condiciones sociales son propicias: el incremento de poblacion ocupada deriva en que muchas familias disponen ahora de menos tiempo para cocinar. Por otro lado, el precio de las energías no para de subir y ello hace que los ollas a presión consumidores busquen maneras de ahorrar (como puede verse, por ejemplo, en el boom que han experimentado tecnologías como los leds o en el auge de las comercializadoras alternativas de electricidad). De este modo, el mercado de ollas a presión comienza a crecer, superando el techo que desde siempre le ha supuesto un consumidor fiel y entregado, pero al mismo tiempo limitado. Estos utensilios ya no se adecuan únicamente a las necesidades de cocinar grandes cantidades, en el caso de familias extensas, sino que se adaptan incluso a los hogares unipersonales. Tampoco se trata ya de un utensilio ajeno a los más jóvenes, sino que se introduce con fuerza el concepto de fast food saludable. Todo ello ha hecho reactivar este mercado, de la mano de una corriente que valora cada vez más la comida sana. A favor de las ollas a presión juegan sus claras ventajas: ahorro de tiempo, ahorro de energía, conservación de las propiedades nutritivas de los alimentos y cocina sana y sin grasas. Y es que cocinan tres veces más rápido, ahorrando hasta un 70% de energía y un 70% del tiempo de preparación. seguras y saludables La olla a presión ya no es solamente una opción interesante para familias con muchos miembros, sino que se adapta incluso a los hogares unipersonales, con capacidades de apenas 4 litros y flexibilidad en cuanto a su uso. Una cuestión clave, sobre la que se están centrando las investigaciones, es la facilidad de apertura y cierre. Actualmente, ya existen sistemas muy simplificados, accionables con una sola mano y sin apenas esfuerzo. Una de las mejoras introducidas de modo general es la adaptación a todo tipo de fuentes de calor, incluida la inducción Perfect Pro de WMF Olla Capri de Bergner 34 - menaje
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