50 IMPRESIÓN 3D EN METAL fabricando piezas metálicas nuevas, sin olvidar que no todos los residuos sirven, sino que dependerá de cómo los separan o cómo los trabajan para convertirlos en materia prima de nuevo”. CON UNA MIRADA INDUSTRIAL DEL MERCADO Uno de los conceptos que más enfatiza Felip Fenollosa sobre CIM UPC es su vocación de producción. Al funcionar como una empresa industrial, más allá de un centro de investigación, ellos buscan que sus desarrollos, sus innovaciones, tengan una aplicación real y efectiva en la empresa. “Analizamos para ellas prototipos, materiales, les indicamos qué materia prima es fácil de conseguir y cuál no, qué tecnología le sale más a cuenta…para que al final, decidan dar el paso con la máxima información posible”. Fenollosa habla de empresas dedicadas a la implantología, pero también de fabricantes de piezas metálicas para automoción —“piezas que deben pasar unos controles de calidad y homologación importantes”, añade— y que, además, suelen ser de diseño complejo. “Aquí es donde la fabricación aditiva supone un valor diferencial, donde puede competir con el molde tradicional y el mecanizado con aluminio. Esta tecnología les puede suponer ahorros hasta del 50%, sin olvidarnos de la reducción de pesos, factor fundamental en los próximos proyectos tanto en automoción como aeronáutica”. Pero el director de I+D estratégica de CIM UPC va más allá: “La fabricación aditiva ofrece la oportunidad de fabricar de manera distinta, no solo hacer lo mismo con menos peso… significa también poder innovar para buscar nuevos clientes en nuevos mercados”. INVESTIGANDO CON BIMATERIALES Una de las zonas de investigación en CIM UPC se dedica a imprimir con bimateriales, a partir de una bobina de filamento de soldadura de acero inoxidable que, transportado por un cable especial a base de rodamientos, se une a otro material, en este caso cobre, mediante tecnología de fusión en una máquina formada por láseres azules que confieren la energía necesaria para esta unión bimaterial. Este método permite controlar al máximo el punto de fusión y la energía emitida, logrando una alta calidad del acabado del producto final. “Sería una tecnología intermedia entre las anteriores, para aquellas empresas que quieran adentrarse en la impresión 3D metálica con calidad, pero sin necesidad de inversiones prohibitivas ni en la máquina ni la materia prima y que no requiere de control de atmósfera y, además, es aplicable tanto a acero inox y cobre como a titanio, Inconel… u otro material metálico que pueda fundirse”. Al final, en CIM UPC se trata de poner las máquinas al límite para determinar su grado de fiabilidad y usabilidad y saber hasta dónde pueden llegar. “Ayudar a los fabricantes de equipos a conocer los límites de sus tecnologías y ayudarlos en la monitorización de las máquinas, para saber al detalle el comportamiento en cada caso. Se trata de tecnologías en desarrollo y nos dedicamos a la prueba y error constantemente. En definitiva, CIM UPC pone la ciencia y la tecnología”. Resultado de ello es por ejemplo el estudio que están realizando con una máquina equipada con láser azul, la M600 de Meltio que a diferencia de los láseres de infrarrojos convencionales que funcionan muy bien en acero, pero flaquean con materiales reflectantes, logra que la pieza absorba altos índices de energía del láser, de modo que está capacitado para trabajar cualquier metal y sus combinaciones. “Aquí la decisión por parte del fabricante de la máquina, al incorporar el láser azul, ha sido una novedad importante. Primero, porque para reducir los costes han eliminado el amplificador del láser de fibra, dejando únicamente el láser con los diodos. Pero, el diseño del foco con diversos láseres alrededor de la salida del filamento de material, ha resultado una solución de éxito”. El resultado ha sido una máquina polivalente a diferencia de las de fusión de polvo, mucho más especializadas con un material para una pieza seriada. “Con esta tecnología mediante bobina de filamento de metal, cambiar el material es tan sencillo como cambiar esta bobina”. Algo especialmente interesante para las pymes y micropymes que son flexibles y demandan, precisamente, flexibilidad a la hora de poder fabricar uno u otro producto indistintamente “empresas que hoy fabrican un radiador de Inconel pero que mañana, deben hacer un álabe de titanio”. Fenollosa admite que la respuesta por parte de las empresas ha sido muy buena, incluso más de Foto 6 y 7: CIM UPC está también probando una tecnología desarrollada por Meltio, basada en el láser azul para obtener piezas bimateriales. El diseño del foco, con diferentes láseres colocados alrededor de la salida del material en filamento, logran esta unión con menor energía y, por tanto, menor consumo.
RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx