206 PABELLÓN 1, STAND B29 Sigaus destaca la importancia de la divulgación sobre la gestión de los lubricantes usados El sector industrial es clave para una economía competitiva, estable y sostenible. Un tejido industrial fuerte reduce nuestra vulnerabilidad ante las diversas coyunturas económicas y las propias crisis sistémicas, e impulsa activamente la innovación, la digitalización y la internacionalización, además de la creación de empleo de calidad y el bienestar del conjunto de la sociedad. Hoy, además, el sector industrial se convierte en eje fundamental de la recuperación económica que tenemos por delante, tras estos dos años en los que seguimos experimentando las consecuencias derivadas de la pandemia, la escalada de precios o la crisis de suministros. Pero pese a las dificultades vividas, España tiene ahora una oportunidad única para renovar su modelo productivo y hacerlo más resiliente y circular, gracias al impulso que supondrán los 140.000 millones de euros que la Unión Europea inyectará a través de los distintos mecanismos contemplados en el Plan de Recuperación y Resiliencia. El peso de la actividad industrial en España se deja notar también en lo que se refiere al consumo de aceite lubricante —en 2021 se comercializaron en el mercado español casi 295.000 toneladas de lubricantes, de las que un 42% fue a parar al sector industrial, la segunda actividad productiva que más consume este tipo de producto por detrás de la automoción—, y, por tanto, en la generación de su residuo, el aceite industrial usado, del que, cada año, se recogen unas 45.000 toneladas, en alrededor de 24.000 operaciones de recogida registradas en unas 10.400 industrias. Más del 28% del volumen total de residuo recogido anualmente, y el 15% de los puntos productores, provienen del sector industrial. Más del 28% del volumen total de residuo recogido anualmente, y el 15% de los puntos productores, provienen del sector industrial.
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