M315 Industria MetalMecánica

Hoy hablamos con…. José María Fernández Alcalá, Director de Economía Circular de IHOBE, Sociedad Pública de Gestión Ambiental del Gobierno Vasco. Jose María Fernández Alcalá es Ingeniero indus- trial (especialidad mecánico) por la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Bilbao (1999) y Diplomado en Estudios Avanzados en el mismo centro por el trabajo ‘Ingeniería del Diseño Ecológico de Productos Industriales’ (2006). Especialista en la mejora ambiental de productos y el Análisis de Ciclo de Vida (ACV), ha participado como experto en el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEP-PNUMA) para la capacitación de Universidades y centros tecnológicos en Latinoamérica. En la actualidad ocupa el cargo de Director de Economía Circular en Ihobe. SISTEMA INTEGRADO DE GESTIÓN DE ACEITES USADOS, SIGAUS, S.L. • Av. de Europa, 34 D - 3ª planta • 28023 • Madrid Tel. 91 799 15 51 • Fax 91 799 15 52 • info@sigaus.es www.sigaus.es D esde la primera revolución industrial nuestra economía ha sido esencialmente lineal, un camino sólo de ida en el que tomamos los recursos de la naturaleza, los transformamos, los consumimos y acaban convertidos en residuos. Hoy asistimos a la ‘cuarta revolución industrial’, impulsada por la digitalización y la inno- vación, pero también por el gran potencial de los nuevos modelos de producción y gestión circulares, donde los residuos se transforman en materias primas listas para ser utilizadas en nuevos procesos productivos. Es el momento de la ECONOMÍA CIRCULAR y de la INDUSTRIA 4.0 , que van a traernos nuevas formas de producir que permitan conservar y recuperar el valor económico de los recursos antes de que acaben en los vertederos o sean de otra forma eliminados. Para hablar del futuro en el sector industrial, SIGAUS invita a expertos de estos ámbitos con el objetivo de analizar las posibilidades de las tecnologías emergentes, los nuevos nichos de mercado y la oportunidad que todo ello supone para el sector en términos de eficiencia, ahorro de costes y reducción de sus impactos sobre el medio ambiente. SIGAUS es el SISTEMA DE GESTIÓN encargado en España de la correcta recogida y tratamiento de los aceites industriales usados procedentes de los motores de los vehículos y la maquinaria industrial, y cuyas sustancias conta- minantes los convierten en un potente enemigo para el medio ambiente y la salud de las personas. El sistema se financia a través de una aportación que se paga en función del aceite industrial puesto en el mercado (0,06 € POR CADA KG) , que es repercu- tida al consumidor final y que se destina íntegramente a la gestión del residuo, haciendo posible un SERVICIO UNIVERSAL de recogida de este residuo peligroso y su transformación en nuevos recursos. Un ejemplo perfecto de Economía Circular en el sector industrial. DIÁLOGOS EN CIRCULAR El momento actual es propicio para hablar de recuperación, y los expertos coinciden en que ésta debe abordarse desde la sostenibilidad. ¿Cómo puede el sector industrial contribuir amodelos de gestiónmás circulares e innovadores que faciliten esa transición? En el ámbito europeo, la reciente aprobación del Pacto Verde (“Green Deal”) sienta las bases de una nueva estrategia de crecimiento que transformará la UE en una economía moderna, eficiente en el uso de los recursos y competitiva. Asociado a este Pacto se han publicado numerosas estrategias y hojas de ruta europeas, desde el Plan de Acción de Economía Circular, hasta la nueva Estrategia Industrial Europa, o la nueva Política de Consumidores. Todas ellas llevan asociado un cambio de rumbo en las políticas de ayudas e incen- tivos, así como un nuevo marco legislativo que permita el cambio del actual modelo de negocio hacia una economía más circular, que va a coincidir con la necesaria reactivación de nuestra economía, derivada de las consecuencias de la COVID-19. Esta reactivación económica debe estar plenamente alineada con el Pacto Verde Europeo, aunando crecimiento económico, empleo y protección del medio ambiente e impulsando una economía disociada del uso de los recursos y baja en emisiones de gases de efecto invernadero. Cualquier plan de recuperación que se diseñe a partir de ahora tiene que ser capaz de fortalecer la resiliencia económica, social y ecológica y promover un cambio sisté- mico y duradero que implique nuevas prácticas y tecnologías sostenibles, su difusión, la participación de la sociedad y la reconfiguración de los sistemas establecidos. Al hablar de Economía Circular la gestión de residuos es un pilar clave. En el avance de este nuevo paradigma, ¿qué papel desempeñan los llamados Sistemas Colectivos de Responsabilidad Ampliada del Productor (SCRAP), como es el caso de SIGAUS en el ámbito de los aceites industriales? La Economía Circular es mucho más que residuos. Su objetivo último es que se generen los menos posibles y para ello es muy importante tener en cuenta dos consideraciones: la función del producto y la perspectiva de su ciclo de vida. Todo producto busca satisfacer una demanda y la máxima de la Economía Circular será hacerlo de la mejor manera y con el menor impacto ambiental, previniendo la gene- ración de residuos y asegurando siempre la correcta gestión de éstos. Es en este último aspecto en el que los Sistemas Colectivos de Responsabilidad Ampliada del Productor (SCRAP) hacen valer su actividad, aplicando el Principio de Responsabilidad Ampliada del Productor. Dado su importante papel en este sentido, propondría un reto a futuro para los SCRAP, y es el de convertir ese principio tan conocido de que “el que contamina paga” en un factor de diferenciación y competitividad empresarial, basado en “quien no contamina, es más competitivo”. Para ello, estos sistemas tienen en su mano la aplicación de conceptos como la ecomodularidad de las tasas económicas que rigen su funcionamiento, para hacer que ésta premie a aquellos productos ambientalmente mejores. De este modo, aunaremos comportamiento ambiental y competitividad y aceleraremos la necesaria transición a esa tan deseada nueva Economía Circular. La colaboración público-privada y de los distintos ámbitos (empresas, universida- des, centros de investigación y Administraciones) es indispensable. Quizá un buen ejemplo es el Basque Ecodesign Center gestionado por IHOBE y en el que partici- pan importantes empresas del País Vasco. ¿Cuál es el secreto para que este tipo de colaboraciones sean exitosas? Sin lugar a duda, el compromiso conjunto y compartido de las Administraciones públicas, las empresas, los centros tecnológicos y los agentes del ámbito formativo y académico es una condición básica para poder abordar esta transición socioe- conómica necesaria. Los medios estrictamente públicos no son suficientes para el desarrollo de todo el trabajo que implica esta transición. Por eso el apoyo de la iniciativa privada es fundamental. Un buen caso de éxito de colaboración público-privada es, efectivamente, el Basque Ecodesign Center, en el que colaboran el Gobierno Vasco, grandes empresas vascas con una alta capacidad de tracción sobre sus proveedores, y los clústeres indus- triales del País Vasco. Gracias a ello se han desarrollado metodologías y proyectos innovadores que después se han transferido al resto del tejido industrial vasco, y actualmente este centro está demostrando ser también un instrumento fundamen- tal en el despliegue de la Economía Circular entre las PYME vascas a través del impulso entre sus proveedores y las convocatorias de ayudas para el desarrollo de proyectos ecoinnovadores. Otro de los aspectos imprescindibles para abordar con éxito la transición hacia un modelo sostenible y circular es la sensibilización y formación de la sociedad, y especialmente de los nuevos profesionales. ¿Cómo valora el papel de iniciativas como el Aula Ambiental SIGAUS o el recientemente inaugurado Basque Circular HUB, centro de servicios avanzados en Economía Circular de Euskadi? Es evidente que la Economía Circular no sólo incumbe a las Administraciones y a las empresas, sino que afecta a todos los que formamos parte de la sociedad. No podemos transitar de un modelo económico lineal a uno circular si no cambiamos los patrones de consumo y las pautas de comportamiento de la ciudadanía. Por ello es de vital importancia trabajar en la sensibilización y formación de la socie- dad, tanto desde el punto de vista de consumidores como desde el fomento de las nuevas capacidades profesionales necesarias para integrar esa transición en los medios técnicos y productos, algo en lo que precisamente trabaja SIGAUS a través de su Aula Ambiental. En el caso del Basque Circular Hub, el primer centro de servicios avanzados de Economía Circular de España y del Sur de Europa y nacido de la colaboración entre el Gobierno Vasco, el Ayuntamiento de Bilbao, y varias Universidades y centros de investigación, una de sus actividades prioritarias es la formación experta en Economía Circular dirigida tanto a alumnado recién graduado, como al propio profesorado, tanto de centros universitarios como de Formación Profesional, y que también se extenderá a trabajadores de empresas, a los que se les ofrecerán además servicios como el auto- diagnóstico del grado de circularidad de sus procesos industriales, o la posibilidad de desarrollar proyectos técnicos con jóvenes formados en sus propias instalaciones. •