Durante la obra se realizaron numerosas visitas periódicas, centradas en las revisiones de ejecución de instalaciones, que incluían también pruebas de estanquidad de tuberías y conductos. El fruto de este trabajo fueron los informes de resultados que fuimos emitiendo, así como la realización de tablas de seguimiento con las anomalías detectadas. El proyecto, aunque se vio afectado por la pandemia del COVID-19, no interrumpió sus obras. Tras la ralentización de las obras por la pandemia, la construcción aumentó el ritmo de ejecución y de las pruebas prefuncionales de las instalaciones, pasando de visitas periódicas de los equipos de commissioning, a una presencia continua en la obra. FASE DOS DEL COMMISSIONING: DE LAS PRUEBAS PREFUNCIONALES A LAS FUNCIONALES Una vez concluidas todas las pruebas prefuncionales, comenzaron las pruebas funcionales de todas las instalaciones, con la incorporación del personal de mantenimiento de Six Senses. Al igual que la fase anterior, esta fase fue documentada mediante informes de resultados y tablas de seguimiento de PEM, las cuales se actualizan semanalmente. Esto permite que todas las partes tengan información actualizada del proceso de Cx. De igual manera, desde Commtech facilitamos el seguimiento del proceso de commissioning para la certificación BREEAM, con la que cuenta el hotel. BREEAM es el certificado de construcción sostenible más utilizado y el primero creado en el mundo. Desde hace más de una década -2010- está adaptado al idioma, la normativa y la práctica constructiva en España. Contar con el commissioning de Commtech, ha garantizado a Six Senses que las instalaciones de su hotel en Ibiza se entregan a la propiedad en condiciones óptimas de funcionamiento, lo que repercute en la satisfacción final de todos los actores de la obra y, por supuesto, en los usuarios finales, los huéspedes del hotel. ESTUDIOS DE CALIDAD AMBIENTAL A CARGO DE AMBISALUD En el proyecto realizado para Six Senses también intervino de manera activa otra de las compañías del Grupo Aire Limpio, Aambisalud. Asegurar la salud, comodidad y bienestar de los usuarios, clientes y visitantes en los edificios, más aún en un caso como este, que tiene por objeto un hotel, depende en gran medida de la calidad ambiental interior (CAI). Y en este sentido, la normativa fundamental en nuestro país es el Reglamento de Instalaciones Térmicas de la Edificación (RITE), que establece la obligatoriedad de llevar a cabo estudios sobre la calidad ambiental, así como una serie de revisiones periódicas de la higiene de los conductos en aquellos edificios que cuenten con una potencia térmica instalada superior a 70 kw, labores ambas en las que Ambisalud es referente. La calidad del aire interior en un hotel tiene un impacto significativo directo en la salud y el bienestar de las personas que trabajan, visitan o se alojan en sus espacios, ya que influye directamente en el estado de ánimo, en el desempeño laboral y en el confort de los clientes. Y en ese sentido, vigilar el cumplimiento de todos los parámetros es fundamental para asegurar el éxito de este tipo de negocios. n
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