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y eléctrica y un sistema de control automático basado en integraciones MODBUS, BACNET, WEB Server y comunicaciones IP. La comunicación IP y las conexiones bidireccionales con Internet son fundamentales. En la figura 2 se remarca la arquitectura de control. Se trata de un sistema de producción de climatización y ACS que se genera con dos bombas de calor, una de aerotermia situada en el sótano y otra de geotermia, situada en la cubierta. ¿Una bomba de calor geotérmica en cubierta?. Sí, porque el sistema de control lo hace posible. Se instaló también un sistema de paneles fotovoltaicos híbridos en los que se produce energía eléctrica y como producto residual agua caliente. Con ello conseguimos tres importantes avances: • Producción de energía eléctrica gratuita. • Producción de agua caliente que empleará la máquina geotérmica para poder evaporar contra esa entalpía residual y de esta forma seguir en funcionamiento durante el mayor tiempo posible (recordemos el mayor rendimiento de la geotermia sobre la aerotermia). • Refrigerar con la evaporación de la máquina geotérmica los paneles solares con el consiguiente incremento de rendimiento de las células fotovoltaicas. (Ver figura 3). ¿Quién se encarga de la delicada coordinación entre esa producción solar, arranque geotermia, arranque aerotermia, refrigeración de paneles, etc, para que todo el sistema esté en equilibrio y la geotermia sea capaz de mantenerse mucho tiempo en funcionamiento?: El control automático. En función de las condiciones exteriores, y por lo tanto del rendimiento de la aerotermia, de la gestión del calor residual de los paneles y de la demanda existente en cada momento, el control decide que bomba de calor arranca y cuál será su consigna de funcionamiento y modulación de compresor (su intensidad energética). Para ello el control tomará en cuenta un montón de variables (demandas de clima, de ACS, históricos, radiación solar, temperatura y humedad exterior, temperaturas en los circuitos hidráulicos, etc) para gestionar el solar, su producción calorífica residual y la gestión de las bombas de calor, optimizando siempre, en tiempo real el rendimiento del edificio. Por lo tanto, el control decide qué bomba de calor va a arrancar, con qué intensidad y a qué servicio va a destinar su energía, porque el hidráulico diseñado permite que tanto con aerotermia como con geotermia aportemos el calor o frío sobre el ACS o sobre el clima a voluntad y decisión del BMS. Como vemos, el control es la solución integral al funcionamiento de la instalación. Y esto es algo muy importante, y que lamentablemente muchas veces no se tiene en cuenta. Y es que está muy bien tener diversos sistemas y equipos en una instalación, todos con una electrónica muy vanguardista, con su control propio, pero lo más importante es dar una solución integral al conjunto, implementar una sinergia, un director de orquesta que relacione y coordine perfectamente a todos los instrumentistas, ese cerebro director es el BMS. Lo que no tiene sentido, aunque impera en muchos proyectos, es que cada equipo funcione autónomo con su control y con una pobre comunicación con el resto. Figura 3. "El control es la solución integral al funcionamiento de la instalación" 21 DOSIER REHABILITACIÓN ENERGÉTICA

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