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24 DOSIER CALEFACCIÓN su aislamiento y la demanda térmica es sensiblemente menor a la inicial; en casi todos los casos incluso los emi- sores (radiadores) que se instalaron originalmente para trabajar a más de 70 °C serán válidos para trabajar con calderas de condensación. Eso sí, será necesario dotar a la instalación del control modulante y/o con sonda exte- rior para que adecúe la temperatura de ida a los radiadores a la mínima posible que sea capaz de dar el con- fort necesario en la vivienda. Muchas veces parecerá que los radiadores solo están templados o casi fríos, pero será suficiente para mantener la vivienda en temperatura. Esto conseguirá unos ahorros muchas veces de más del 10 o 12% ya que la caldera trabajará con eficiencias mayores. Lo anteriormente dicho es per- fectamente válido asimismo para la utilización de bombas de calor como generador de calefacción, ACS e incluso refrigeración. En este caso es necesario dimensionar muy bien los generadores para que las poten- cias instaladas sean las idóneas. No hay duda de que las bombas de calor son una herramienta perfecta para el objetivo de eliminación de gases de efecto invernadero y, en cualquier caso de rehabilitación será necesario tenerlo también en cuenta sin denostar unos u otros sistemas de generación. GASES QUE AYUDEN A LA DESCARBONIZACIÓN Aunque ya con los cambios tecno- lógicos indicados anteriormente se reducirán considerablemente las emisiones de gases de efecto inver- nadero a la atmósfera, los sistemas de combustión seguirán mejorando esta reducción de emisiones. El primer paso es la adición de biogás a las redes de distribución del gas a combustionar. Se van modificando las normas para poder introducir mayores cantidades de estos bio- gases que harán que la combustión sea más medioambientalmente respetuosa. Otro elemento que va a dar mucho que hablar es el Hidrógeno (H 2 ) cuya adición en las redes de gas es hoy por hoy puramente testimonial (<5% en España) y que se irá incremen- tando hasta valores cercanos al 20% en una primera fase. Teniendo en cuenta que se utilice hidrógeno obtenido con energía reno- vable, y que la combustión del H 2 no genera gases de efecto invernadero se puede prever que esas emisiones de efecto invernadero serán consi- derablemente más reducidas. La última pregunta que hay que hacerse es, ¿Hasta dónde se va a llegar con esta tecnología de la com- bustión del hidrógeno? La respuesta la tenemos los fabricantes. Es una tecnología a implementar en un futuro muy cercano con multitud de experiencias reales ya instaladas en Europa. No se habla de teorías a investigar. Los fabricantes ya disponen de fechas de lanzamiento para estos produc- tos. Lo que ahora hay que hacer es empezar a modificar las redes de suministro y adecuarlas al H 2 y poder disponer de Hidrógeno verde. El futuro de la descarbonización pasará también por la utilización de sistemas de combustión, eso sí, con hidrógeno y mientras tanto la utilización de calderas de conden- sación seguirá contribuyendo a esa reducción de gases de efecto inver- nadero objetivo mundial. n En casi todos los casos incluso los radiadores que se instalaron originalmente para trabajar a más de 70 °C serán válidos para trabajar con calderas de condensación. El futuro de la descarbonización pasará también por la utilización de sistemas de combustión, eso sí, con H 2 y mientras tanto la utilización de calderas de condensación seguirá contribuyendo a esa reducción de gases de efecto invernadero objetivo mundial

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