IA23 - Tecnología y equipos para Almazaras
16 FORMACIÓN car el personal a falta de 20 días para abrir las instalaciones, no es una buena señal. Puede ser que parte del perso- nal con el que contó en la campaña anterior ya no esté disponible. Esa eventualidad resulta perjudicial. Y el maestro, que debería estar fijo todo el año, debe contar la potestad para formar el equipo que necesita", con- sidera José Alba. "Si la almazara no puede costear un equipo de opera- rios durante todo el año, debe contar con personal eventual que empiece a trabajar como mínimo 15 días antes del inicio de campaña para recibir la formación teórica y práctica necesa- ria para cubrir su puesto". “Las condiciones de trabajo son tan variables como tipos de almazaras pueda haber. Pero el gran problema es sin duda la temporalidad, y los pro- fesionales quieren contar con una seguridad laboral que vaya más allá de los dos o tres meses de campaña. Para ello es interesante que las per- sonas recién formadas, y con un alto conocimiento, puedan ofrecer solu- ciones sobre su propia temporalidad y a la temporalidad de la actividad de la almazara con actividades comple- mentarias que ayuden a incrementar la rentabilidad”, considera Miguel Abad. Los expertos consideran que está cos- tando en algunas zonas dar el paso en el relevo generacional, pero que existen oportunidades para gente joven cualificada con iniciativa que se ofrezca a las almazaras para ampliar la actividad económica de las mismas. “Claro que se vive de este oficio”, explica Lola Nogales, maestra de almazara en la Cooperativa San Isidro de Gilena (Oleoestepa) que lleva tan solo dos años trabajando en el sector tras for- marse en el IES Federico García Lorca de La Puebla de Cazalla (Sevilla). "Se puede vivir tanto económicamente, como por los conocimientos que te aporta". Nogales hace a su vez un lla- mamiento a que la cultura por el olivar y el aceite de oliva sea enseñada en las escuelas. "Se debe despertar el interés desde mucho antes. Una gran cantidad de gente joven acuden a los ciclos como una opción para encon- trar un puesto de trabajo, y no porque estén ya enamorados del mundo del aceite", señala. n En el segundo bloque del Encuentro intervinieron Manuel Caravaca, Director de Producción de Molino de las Torres; Miguel Ángel Espinosa, gerente de la Almazara Cruz Esteba; y Lola Nogales, maestra de almazara en la Cooperativa San Isidro de Gilena (Oleoestepa). Alumnos como Miguel Ángel, de la EFA Molino de Viento, tuvieron oportunidad sus consultas sobre las salidas profesionales que presenta el sector.
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