ENTREVISTA 32 A nivel de suelo no es recomendable en aquellos demasiados pesados y con altas pluviometrías sin hacer buenos drenajes o camellones para evitar problemas con verticiliosis o asfixia radicular. Y si estamos con poca dotación de agua, tener muy claro en qué momento aplicarla bajo estrategias de riego deficitario controlado. Finalmente hay que encontrar el punto adecuado de madurez para recolectar y en menos de 24 horas pelar y secar para evitar problemas de manchado del fruto. Los resultados de algunos estudios han reflejado que la producción del pistacho está estrechamente relacionada con el vigor de los árboles y por tanto con su desarrollo vegetativo. En este sentido, ¿es recomendable llevar a cabo, apoyándose en la tecnología, un manejo diferenciado en la aplicación del riego y fertilización variable? En el cultivo de pistacho con riego, al igual que en otros frutos secos como el almendro, la aplicación de agua deriva directamente en obtener unos mayores rendimientos, pero además un aumento de la calidad del fruto (Calibre, % de abiertos, % de vacíos), así como una menor tendencia a la vecería lo que hace que sea mucho más rentable e interesante. A la vez, si aplicamos riego y pensamos en mayores rendimientos hay que tener en cuenta también aplicar más cantidad de nutrición y tener claras sus necesidades en cada momento fenológico. En mi caso, la fertirrigación la realizo con un equipo automático AZUD QGROWAT500/4 multi-inyección con control de pH y CE, lo que me permite aplicar los nutrientes de forma precisa y con un pH ideal para mejorar la absorción de los mismos y tener un control más preciso en el mantenimiento de la instalación. A nivel de riego dispongo de una estación meteorológica para saber las necesidades in situ reales del cultivo y a la vez controlo la humedad en suelo con sondas, lo que me permite tener una refe-
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