FY76 - Futur energy

In early summer 2020, a sealed data centre the size of a shipping container, coated in seaweed, barnacles and anemones, was retrieved from the seabed off Scotland’s Orkney Islands. The retrieval, undertaken by marine specialists, represented the final phase of a long-term project that has demonstrated the feasibility of underwater data centres from a logistical, environmental and economic standpoint. Microsoft deployed the Northern Isles data centre in spring 2018. Named “Project Natick”, the data centre has spent two years on the seabed at a depth of 36 metres, during which time the performance and reliability of the servers in this extraordinary environment has been tested and monitored. To protect the servers, researchers filled the atmosphere inside the container with nitrogen, so unlike a conventional data centre, Northern Isles has no active refrigeration. All the cooling obtained comes from the cold waters off the north of Scotland, efficiently distributed internally thanks to the nitrogen. The experts wanted to confirm their hypothesis, according to which, a sealed container positioned on the ocean floor represents a more stable and reliable operational environment compared to a conventional onshore installation. In fact, in a data centre, usage, corrosion due to oxygen, humidity, temperature fluctuations and possible involuntary damage caused during maintenance tasks are commonplace adverse factors. The Project Natick has confirmed the initial theory, which directly impacts on the sustainability strategy of the Microsoft data centres as regards energy, waste and water. Moreover, the already proven reliability of underwater data centres has driven conversations with a team from Azure, the Microsoft PROYECTO NATICK, EL FUTURO DE LOS CENTROS DE DATOS BAJO EL MAR ES FIABLE, PRÁCTICO Y SOSTENIBLE El pasado año concluía con éxito un proyecto de investigación de Microsoft con 864 servidores funcionando durante dos años bajo el mar, para determinar la viabilidad de los centros de datos submarinos alimentados con energía renovable. La iniciativa, que responde al fuerte compromiso medioambiental de Microsoft, abre la puerta al despliegue y operación de centros de datos tácticos y críticos en cualquier parte del mundo. Los servidores han experimentado una tasa de fallos ocho veces inferior a lo esperado en un centro de datos convencional, gracias, entre otras cosas, a la atmósfera de nitrógeno empleada en la cápsula sellada. PROJECT NATICK, THE FUTURE OF UNDERWATER DATA CENTRES IS RELIABLE, PRACTICAL AND SUSTAINABLE 2020 saw the successful conclusion of the Microsoft research project, with 864 servers working for two years under the sea, to determine the feasibility of underwater data centres powered by renewable energy. The initiative, which responds to Microsoft’s firm environmental commitment, opens the door to the deployment and operation of tactical and critical data centres in any part of the world. The servers have experienced a failure rate eight times lower than that expected in a conventional data centre thanks, among other aspects, to the nitrogen atmosphere inside the sealed capsule. A principios del verano de 2020, se rescataba del fondo marino de las Islas Orcadas, en Escocia, un centro de datos sellado del tamaño de un contenedor que estaba cubierto de algas, percebes y anémonas. La recuperación, llevada a cabo por parte de especialistas marinos, supuso la fase final de un proyecto de larga duración que ha demostrado la viabilidad de los Centros de Datos submarinos desde un punto de vista logístico, ambiental y, también, económico. En la primavera de 2018, bajo el nombre “Project Natick”, Microsoft desplegó el centro de datos Northern Isles a 36 m de profundidad en el lecho oceánico y, durante los dos años siguientes, ha probado y supervisado el rendimiento y la fiabilidad de los servidores en esa condición tan peculiar. Para conservar los servidores, los investigadores rellenaron la atmósfera del contenedor con nitrógeno, así que, a diferencia de un centro de datos convencional, el Northern Isles no contaba con refrigeración activa, sino que toda la refrigeración que obtenía provenía de las frías aguas del norte de Escocia y era distribuida con mayor eficacia internamente, gracias al nitrógeno. Los expertos querían confirmar la hipótesis según la cual un contenedor sellado situado en el fondo del océano representa un entorno operativo más estable y fiable que en una instalación convencional en tierra. De hecho, en un centro de datos al uso, la corrosión provocada por el oxígeno, la humedad, las fluctuaciones térmicas y los posibles daños involuntarios ocasionados durante las tareas de mantenimientos son factores adversos habituales. Con el Proyecto Natick se ha confirmado la teoría inicial, lo que influye directamente en la estrategia de sostenibilidad de los centros de datos de Microsoft en torno a la energía, los residuos y el agua. Además, la ya probada fiabilidad de los centros de datos submarinos ha impulsado las conversaciones con un equipo de Azure, la nube de Microsoft, que busca cubrir las necesidades de los clientes que necesitan desplegar y operar centros de datos tácticos y críticos en cualquier parte del mundo. Prueba de concepto La idea de construir un centro de datos submarino surgió por primera vez en 2014 durante la Think Week, un evento que reúne a los empleados de Microsoft para que compartan ideas innovadoras. El concepto se consideró una vía a explorar para proporcionar servicios en la nube eficientes y más sostenibles a las poblaciones costeras, consiguiendo al mismo tiempo un ahorro energético. Más de la mitad de la población mundial vive a menos de 190 km de la costa así que, si se instalan centros de Eficiencia y Gestión Energética. Centros de Datos | Energy Efficiency & Management. Data Centres FuturEnergy | Diciembre 2020-Enero 2021 December 2020-January 2021 www.futurenergyweb.es 89

RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx