FY76 - Futur energy

A fondo: Análisis 2020 | In depth: 2020 Analysis www.futurenergyweb.es FuturEnergy | Diciembre 2020-Enero 2021 December 2020-January 2021 40 ques eólicos con presencia en prácticamente todas las comunidades autónomas nos convierten en un país líder en energía eólica. Este liderazgo y competitividad nos ha facilitado la instalación en 2019 de 2.243 MW y de más de 1.190 MW en 2020. Estas cifras suponen récord de instalación desde 2009 y un esfuerzo importante por parte de la cadena de valor del sector eólico. Además del reto que supone la instalación de la nueva potencia, los parques actuales continúan generando electricidad, aportando el 21% de la demanda eléctrica con seguridad, competitividad y eficiencia. Actualmente, la eólica es ya la primera tecnología del sistema por potencia instalada y la segunda tecnología que más electricidad aporta a nuestra sociedad. Por todo ello, el sector eólico es considerado como uno de los sectores industriales tractores de la economía española. Pensando ya en el 2021 y en los próximos años, la apuesta firme por la eólica en nuestro país se traduce en un precio competitivo de la electricidad, reducción de emisiones de CO2, aportación al PIB en más de un 0,35% y algo tan necesario como una empleabilidad estable y de calidad. El sector eólico, en la actualidad, emplea a 30.000 profesionales con un índice de incremento anual del 25% (datos de 2019 respecto a 2018). Los planes de recuperación del país deben ser impulsores de una transformación que sirva de oportunidad y apoyo a los sectores que tienen mayor potencial de crecimiento respecto a su aportación a la economía desde una óptica macro (PIB, empleo, exportaciones, inversiones, desarrollo rural, etc.). El sector eólico es, sin duda, tractor para la economía y para otros sectores asociados a su actividad como el portuario, el de la construcción, sector naval o transporte. Todos ellos, son ejemplos de sectores que se benefician colateralmente del desarrollo de la eólica en nuestro país. Las nuevas subastas de energías renovables deben enfocarse de tal modo que maximicen las posibilidades de nuestras fábricas eólicas para poder suministrar los equipos y garantizar así la reactivación del mercado interno y el empleo industrial, potenciando la reindustrialización en España. Además, es importante que tengan en cuenta las características que cada tecnología aporta a la economía, a la sociedad, a la reducción de emisiones y al territorio donde se van a desarrollar las instalaciones. Por todo ello, no se debería recurrir exclusivamente a criterios de evaluación basados 100% en el precio, sino a esquemas multicriterio para la obtención del mejor valor macro, que sea objetivable desde un punto de vista económico. Por otro lado, los cupos incluidos en el calendario de subastas deben dimensionarse de forma razonable teniendo en cuenta la capacidad industrial eólica que tiene nuestro país y los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima. De igual modo, desde el sector eólico seguimos apostando por subastas de proyectos concretos, con criterios de precalificación e hitos intermedios exigentes y rigurosos, que garanticen que los proyectos se ejecutan en el tiempo establecido. Nuestro sector está más que preparado para afrontar con éxito los retos tecnológicos, logísticos e industriales que tenemos por delante y dará una respuesta óptima para llevar a cabo la instalación de la potencia asignada a la eólica. Ya lo hemos hecho en el pasado y estamos preparados para ello. Para todo ello, debemos contar con políticas industriales y energéticas valientes y estables en el tiempo, que apuesten por mantener la cadena de valor de las tecnologías clave para la descarbonización, como es la eólica. La inversión en I+D del sector eólico está muy encima de la media (equivalente al 4,19% del PIB y la media en España es del 1,24% del power sector is seen as one of the driving industrial sectors of the Spanish economy. Looking ahead to 2021 and the coming years, the firm commitment to wind power in Spain translates into a competitive electricity price, reduced CO2 emissions, a contribution of more than 0.35% to GDP and the vitally necessary stable and quality employment. The wind power sector currently employs 30,000 professionals with an annual growth index of 25% (2019 data compared with 2018). The country’s recovery plans must drive a transformation that provides opportunity and support to the sectors with the greatest potential for growth as regards their contribution to the economy from a macro perspective (GDP, jobs, exports, investments, rural development, etc.). There is no doubt that the wind power sector is a driver for the economy and for other sectors associated with its activity, such as ports, construction, the maritime industry and transport. All these are examples of sectors that enjoy collateral benefits from the development of wind power in Spain. The new renewable energy auctions must be focused to maximise the possibilities of our wind power factories, so that they can supply the equipment and thereby guarantee the reactivation of the domestic market and industrial employment, boosting reindustrialisation in Spain. Moreover, it its important that they take into account the characteristics each technology brings to the economy, to society, to emissions reduction and to the territory in which the installations are to be deployed. As a result, evaluation criteria based 100% on price should not form the exclusive basis for these auctions, but rather multi-criteria schemes to obtain the best macro value, which is objective from an economic standpoint. Furthermore, the quotas included in the auction calendar must be defined on a reasonable basis, considering the wind power capacity available in Spain and the objectives of the National Energy and Climate Plan. Similarly, the wind power sector continues to support auctions for specific projects, with pre-qualification criteria as well as demanding and rigorous intermediate milestones, which guarantee projects are executed within the established timeframes. Our sector is more than ready to successfully address the technological, logistic and industrial challenges facing us in future and will provide an optimal response to install the capacity allocated to wind power.We have already done this in the past and are ready to do so again. However, we need bold industrial and energy policies that can stand the test of time, which are committed to supporting the value chain of technologies that are key to decarbonisation, such as wind power. Investment in R&D in the wind power sector is well above the average (equivalent to 4.19% of GDP, where the average in Spain Quijote Andaluz. Fotografía presentada por José Manuel Martínez Montilla al Premio Eolo de Fotografía de AEE 2020 | Andalusian Quixote. Photo entered by José Manuel Martínez Montilla for the 2020 AEE Eolo Photograhy Prize

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