Al igual que en épocas anteriores, el transporte, junto con la energía y las comunicaciones, está ejerciendo de elemento de cambio disruptivo en la sociedad, lo que supone la aparición de nuevos retos y oportunidades, tanto tecnológicas e industriales como políticas y sociales, situando a las personas en el centro del nuevo paradigma de la movilidad. Recientemente, la Comisión Europea ha publicado un estudio acerca del futuro del transporte (“The Future of Road Transport”) y su impacto en la sociedad, motivado principalmente por cuatro elementos: la automatización, la conectividad, la descarbonización y el uso compartido del vehículo. Si centramos este análisis en el transporte realizado con vehículos ligeros, estamos hablando de vehículos eléctricos, autónomos, conectados y compartidos. Y esto hace que debamos plantearnos varias cuestiones relacionadas con este cambio radical, que ya se está produciendo y que se acelerará durante la próxima década. Uno de los cambios de mayor impacto vendrá promovido por la creciente digitalización de la industria vinculada a la movilidad, lo que permite dar un mayor protagonismo a las infraestructuras de electrificación y a las tecnologías de la información y comunicación. En este nuevo escenario, el vehículo dejará de ser el epicentro y pasará a serlo el usuario, quien dispondrá de una capacidad de decisión mucho mayor a la hora de decidir cómo moverse. Un ejemplo del cambio de paradigma que está sufriendo la industria de la movilidad, y sus consecuencias, lo tenemos muy cerca de nosotros. Hace unos días entraba en funcionamiento el primer servicio de coche eléctrico compartido en Asturias y próximamente se pondrá en marcha el segundo. Por increíble que parezca, en nuestro país sólo Madrid cuenta con este tipo de servicio al ciudadano, lo que pone de manifiesto que hay nuevas reglas de juego, y que muchas de esas reglas las están escribiendo jóvenes emprendedores asturianos, que han sabido interpretar las oportunidades que aparecen ante esta nueva realidad. Asturias tiene un gran reto que abordar, que no es otro que reinventarse como región apostando por un nuevo desarrollo tecnológico, industrial y de servicios. Esto conllevaría un nuevo modelo económico y social soportado por sectores generadores de productos y servicios de alto valor añadido. La región tiene un tejido educativo y empresarial capaz de convertirse en el caldo de cultivo necesario para conseguir que la movilidad eléctrica sea un factor de transformación de la sociedad. Sería imperdonable no aprovecharlo. As in previous eras, transport, along with energy and communications, is having a disruptive change on the society, which has led to the emergence of new technological and industrial as well as political and social challenges and opportunities, positioning the individual at the centre of the new mobility paradigm. “The Future of Road Transport”, a report recently published by the European Commission about the future of transport and its impact on society, has been driven mainly by four elements: automation, connectivity, decarbonisation and the shared use of the vehicle. And focusing this analysis on the transport undertaken by light vehicles, these are electric, autonomous, connected and shared vehicles, which means addressing several issues relating to this radical change that is already taking place and which will gain momentum over the next decade. One of the changes with the greatest impact will be driven by the growing digitalisation of the industry linked to mobility, which will give electrification infrastructures and the information and communication technologies a more prominent role. In this new scenario, the epicentre will shift from the vehicle to the user who will have a much greater decision-making capacity when choosing how they will move around. One example of the paradigm shift being experienced by the mobility industry, and its consequences, is on our doorstep. A few days ago the first shared electric car service in Asturias started operating, with a second due to be launched in the near future. As incredible as it may seem, this type of service is only available to the residents of Madrid, demonstrating that there are new rules of the game and that many of these rules are being written by young entrepreneurs in Asturias who have recognised how to interpret the opportunities that are emerging in the light of this new reality. Asturias has to address a huge challenge which is none other than reinventing itself as a region committed to a new technological, industrial and services development. This needs a new economic and social model supported by sectors that generate high added value products and services. The region boasts an educational and corporate fabric capable of becoming the breeding ground necessary to ensure that electric mobility is a transforming factor of the society. Failing to maximise this potential would be unforgivable. LA MOVILIDAD ELÉCTRICA COMO FACTOR DE TRANSFORMACIÓN EN ASTURIAS El transporte por carretera ha tenido un elevado desarrollo desde mediados del siglo pasado hasta la actualidad gracias a la mejora de la economía en términos globales. Una de las consecuencias de este desarrollismo económico y social en el mundo es el incremento de la movilidad de bienes y personas, lo que a su vez supone un aumento de la polución y una dependencia cada vez mayor del petróleo. Otra consecuencia de este desarrollo ha sido el trasvase de población del entorno rural al urbano, transformando las ciudades a partir de la segunda mitad siglo XX para adaptarlas al vehículo. E- MOBILITY AS A FACTOR TO TRANSFORM ASTURIAS Road transport has enjoyed a high level of development since the middle of last century to date thanks to economic improvement in global terms. One of the consequences of this economic and social developmentalismworldwide is the increased mobility of goods and people, which in turn represents an increase in pollution and an increasingly greater dependence on petroleum. Another consequence has been the movement of populations from the rural to the urban environment, transforming cities as from the second half of the 20th Century to adapt them to the vehicle. Adriano Mones Bayo Presidente de la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico (AEDIVE) Chair of the Spanish Business Association for Promoting and Developing the Electric Vehicle Market (AEDIVE) www.futurenergyweb.es 42 FuturEnergy | Agosto-Septiembre August-September 2019 Movilidad Eléctrica | E-Mobility
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