Aumenta la inversiónenalmacenamientoa medidaque se reducen los costes de las baterías Energy storage investments boom as battery costs falls Las instalaciones de almacenamiento de energía, incluidas las baterías estacionarias utilizadas en ocho aplicaciones, pero excluyendo la hidroeléctrica de bombeo, en todo el mundo, se multiplicarán exponencialmente, de un modesto 9 GW/17 GWh desplegado hasta 2018 a 1.095 GW/2.850 GWh para 2040, según el último pronóstico de la empresa de investigación BloombergNEF (BNEF). Según las estimaciones de BNEF, este auge de 122 veces del almacenamiento estacionario de energía durante las próximas dos décadas, requerirá una inversión de 662.000 M$, y será posible gracias a una fuerte disminución del coste de las baterías de ion de litio, además de una reducción del 85% en el período 2010-18. El informe Energy Storage Outlook 2019 de BNEF predice una reducción a la mitad de los costes de las baterías de ion de litio por kWh para 2030, a medida que la demanda despega en dos mercados diferentes: almacenamiento estacionario y vehículos eléctricos. El informe continúa modelando el impacto de esto en un sistema eléctrico global cada vez más penetrado por eólica y solar de bajo coste. Dos grandes cambios en el informe son que BNEF ha aumentado su estimación de la inversión que se destinará al almacenamiento de energía para 2040 en más de 40.000 M$, y que BNEF ahora piensa que la mayoría de la nueva capacidad será a gran escala, en lugar de aplicaciones “detrás del contador” en hogares y negocios. El análisis de BNEF sugiere que se pueden usar baterías más baratas en más y más aplicaciones. Éstas incluyen el desplazamiento de energía (mover en el tiempo el suministro de electricidad a la red, a menudo debido al exceso de generación de solar y eólica), alcanzar el máximo en el sistema de energía al por mayor (para gestionar picos de demanda), así como para los clientes que buscan ahorrar en sus facturas de energía, comprando electricidad a horas baratas y usándola más tarde. A corto plazo, el almacenamiento de energía renovable, especialmente el almacenamiento de energía solar, se ha convertido en un importante motor para la instalación de baterías. Esto configura una nueva era para las energías renovables despachables, basada en nuevas estructuras contractuales entre el desarrollador y la red. Solo 10 países están en camino de representar casi las tres cuartas partes del mercado mundial en términos de potencia instalada, según el pronóstico de BNEF. Corea del Sur es el mercado líder en 2019, pero pronto cederá esa posición, con China y EE.UU. muy por delante en 2040. Los mercados significativos restantes incluyen India, Alemania, Latinoamérica, el sudeste asiático, Francia, Australia y Reino Unido. Se está desarrollando una transición fundamental en el sistema eléctrico y el sector del transporte. La caída de costes de las energías eólica, solar y de las baterías significa que eólica y solar constituirán casi el 40% de la electricidad mundial en 2040, frente al 7% actual. Mientras tanto, los vehículos eléctricos de pasajeros podrían convertirse en un tercio de la flota mundial de vehículos de pasajeros para 2040, en comparación con menos del 0,5% actual, lo que agregaría una gran escala al sector de fabricación de baterías. La demanda de almacenamiento aumentará para equilibrar lamayor proporción de generación renovable variable en el sistema eléctrico. Las baterías se elegirán cada vez más para gestionar esta dinámica combinación de oferta y demanda. El informe revela que el almacenamiento de energía se convertirá en una alternativa práctica para la generación de electricidad de nueva construcción o el refuerzo de la red. El almacenamiento “detrás del contador” también se utilizará cada vez más para proporcionar servicios del sistema además de aplicaciones de cliente. Se prevé que la demanda total de baterías de los sectores de almacenamiento estacionario y transporte eléctrico será de 4.584 GWh para 2040, lo que brinda una gran oportunidad para los fabricantes de baterías y la minería de metales componentes como el litio, el cobalto y el níquel. Energy storage installations around the world, including stationary batteries used in eight applications but excluding pumped hydro storage, will multiply exponentially, from a modest 9 GW/17 GWh deployed as of 2018 to 1,095 GW/2,850 GWh by 2040, according to the latest forecast from research company BloombergNEF (BNEF). This 122-fold boom of stationary energy storage over the next two decades will require US$662bn of investment, according to BNEF estimates. It will be made possible by further sharp declines in the cost of lithium-ion batteries, in addition to an 85% reduction over the 2010-18 period. BNEF’s Energy Storage Outlook 2019 predicts a further halving of lithium-ion battery costs per kWh by 2030, as demand takes off in two different markets: stationary storage and electric vehicles. The report goes on to model its impact on a global electricity system increasingly penetrated by low cost wind and solar. Two big changes in the report are that BNEF has raised its estimate of the investment that will go into energy storage by 2040 by more than US$40bn, and that BNEF now thinks the majority of new capacity will be utility-scale, rather than behind-the-meter in homes and businesses. BNEF’s analysis suggests that cheaper batteries can be used in more and more applications. These include energy shifting (moving the dispatch of electricity to the grid in time, often due to excess solar and wind generation), peaking in the bulk power system (to deal with demand spikes), as well as for customers looking to save on their energy bills by buying electricity at cheap hours and using it later. In the short term, renewables storage, especially the storage of solar energy, has become a major driver for battery installation. This shapes a new era for dispatchable renewables, based on new contract structures between developer and grid. Just 10 countries are on course to represent almost threequarters of the global market in terms of installed capacity, according to BNEF’s forecast. South Korea is the lead market in 2019, but will soon cede that position, with China and the US way out front by 2040. The other significant markets include India, Germany, Latin America, Southeast Asia, France, Australia and the UK. A fundamental transition is developing in the power system and transportation sector. Falling wind, solar and battery costs mean wind and solar are set to make up almost 40% of world electricity in 2040, up from 7% today. Meanwhile passenger electric vehicles could become a third of the global passenger vehicle fleet by 2040, up from less than 0.5% today, adding huge scale to the battery manufacturing sector. Demand for storage will increase to balance the higher proportion of variable, renewable generation in the electricity system. Batteries will increasingly be chosen to manage this dynamic supply and demand mix. The report finds that energy storage will become a practical alternative to new-build electricity generation or grid reinforcement. Behind-the-meter storage will also increasingly be used to provide system services in addition to customer applications. The total demand for batteries from the stationary storage and electric transport sectors is forecast to be 4,584 GWh by 2040, providing a major opportunity for battery makers and miners of component metals such as lithium, cobalt and nickel. Noticias | News FuturEnergy | Julio July 2019 www.futurenergyweb.es 15
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