Movilidad Eléctrica | E-Mobility FuturEnergy | Septiembre September 2017 www.futurenergyweb.es 85 la batería se recarga, reduciendo su consumo principalmente en la última fase, que es la más larga. En este caso, si un vehículo solo estuviese consumiendo 3 kW, seguiría teniendo asignados 10 kW que otros vehículos no podrían utilizar, con lo que la instalación quedaría infrautilizada. Balanceo inteligente: el balanceo inteligente es similar al anterior, pero el sistema de gestión tiene en cuenta la demanda de potencia de todos los vehículos eléctricos conectados y es capaz de reasignar la potencia entregada a cada coche en función de ella. De esta forma, si un vehículo no está utilizando toda la potencia asignada en un principio, esta se reparte entre los vehículos que sí pueden hacer uso de ella. Esto garantiza la máxima utilización de la capacidad de la instalación y una reducción en el tiempo necesario para recargar todos los vehículos. Balanceo dinámico: asignar a un grupo de equipos de recarga una potencia que pueda ser distribuida entre varios vehículos no evita que, cuando no hay ningún vehículo recargando, el resto de la instalación no pueda hacer uso de ella. El balanceo dinámico consiste en medir en tiempo real la energía que se está consumiendo en un parking/edificio y asignar a los cargadores la máxima potencia disponible, teniendo en cuenta que no se supere en ningún momento la potencia total de la instalación. Ventajas del balanceo de potencia Ahorro de costes: es posible instalar un gran número de cargadores con unas modificaciones mínimas en la instalación eléctrica o incluso sin modificación alguna. Los costes del término de potencia también disminuyen y vienen determinados por criterios del gestor de la instalación, no por el tipo y número de equipos de recarga instalados. Carga a máxima velocidad: dado que la potencia de los equipos de recarga instalados ya no supone un coste directo, es posible instalar equipos de más potencia, para dar un mejor servicio a los usuarios. Los vehículos eléctricos siempre cargan a la máxima velocidad posible, sin superar en ningún caso la potencia asignada al grupo (balanceo inteligente) o la potencia máxima disponible en el parking/ edificio (balanceo dinámico). Facilidad de expansión: en una instalación tradicional, añadir nuevos puntos de recarga supone un reto, ya que puede ser necesario volver a dimensionar la acometida y contratar un término de potencia mayor. Sin embargo, en una instalación equipada con balanceo de carga, basta con instalar un nuevo punto y configurarlo para que comparta la potencia disponible con los cargadores ya existentes. No es necesario modificar la acometida eléctrica ni el término de potencia, ganando en flexibilidad y adaptabilidad. Ahorro: un ejemplo práctico Como ejemplo, es posible calcular de una forma sencilla el ahorro para una instalación de 10 cargadores de 22 kW de potencia, con un coste de término fijo de aproximadamente (España) 80 €/kW/año. Una instalación de este tipo, sin considerar los guarantees maximum usage of the installation’s capacity and a reduction in the time needed to charge up every vehicle. Dynamic balancing: allocating an output to a group of charging devices that can be distributed between several vehicles does not mean that the rest of the installation cannot use it when no vehicles are being charged. Dynamic balancing involves the real time monitoring of the energy that is being consumed in a car park/building and allocating the maximum power available to the chargers, ensuring that the total output of the installation is never exceeded. Advantages of load balancing Costs saving: a large number of chargers can be installed making minimal or no modification to the electrical installation. The power contract costs also reduce and are determined by the installation manager criteria rather than by the type and number of installed charging devices. Charging at maximum speed: as the power of the installed charging units no longer represents a direct cost, more powerful units can be installed to offer users a better service. EVs always charge at the maximum speed possible, never exceeding the capacity allocated to the group (smart balancing) or the maximum power available in the car park/building (dynamic balancing). Easy expansion: in a traditional installation, adding new charging points represents a challenge, as it could involve resizing the power supply and contracting more output. However, an installation equipped with load balancing only needs a new charging point which is configured to share the available power with the existing chargers. No modification to the electricity supply or the power contract is necessary, gaining in flexibility and adaptability. Saving: a practical example There is a simple way to calculate the saving for an installation with 10 chargers and a 22 kW output, with a power contract cost of around 80 €/kW/year (in Spain). An installation of this type, without taking into account the electrical installation and civil works costs, is no insignificant matter, representing a power contract cost of €17,600/year. Cargador EFIMOB Pro con balanceo de carga interno EFIMOB Pro charger with internal load balancing
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