FY112

se puede tardar entre dos y tres años en obtener los permisos necesarios para arrancar estos proyectos. Aun así, vemos como el número de proyectos se incrementa poco a poco. En Europa hay una mayor conciencia de que estos proyectos incentivan la actividad agraria y generan nuevos negocios en zonas demográficamente deprimidas, creando empleos de calidad a largo plazo. ¿Por qué? ¿Qué beneficios específicos traerá para España? En primer lugar, permite una diversificación de ingresos para la industria alimentaria y mejora el cumplimiento de las políticas de sostenibilidad que muchas empresas tienen en marcha. Para hacernos una idea podemos echar un vistazo a lo que ocurre en otros países europeos del mediterráneo. Hablamos, por ejemplo, de países como Francia e Italia, que están apoyando firmemente el biometano, ofreciendo facilidades que en España aún no existen. Así, una vaquería en Francia puede contar con apoyo estatal para montar una planta de biometano. Esas facilidades en España no se dan. Otro ejemplo, las almazaras en Italia pueden usar subproductos de la producción de aceite para generar biometano en condiciones ventajosas, algo que en España no es tan sencillo. Este tipo de proyectos no solo diversifican los ingresos de la industria alimentaria, sino que también mejoran significativamente la gestión medioambiental de los residuos. ¿Qué políticas podrían impulsar el biometano en España? Las políticas deben centrarse en no enviar residuos orgánicos a vertederos y en fomentar el tratamiento medioambiental de desechos de la industria primaria y transformadora. Además, la fertilización orgánica, que podemos lograr gracias a los digeridos de las plantas de biogás, es crucial para reducir la dependencia de fertilizantes químicos y para reciclar nutrientes esenciales como el nitrógeno, fósforo y potasio. Por tanto, hay varias vías para hacer viables los proyectos de biometano: incentivar la demanda de biometano como gas renovable, mejorar la gestión de residuos y fomentar la fertilización orgánica. tico y uno agrario o medioambiental, porque permite involucrar a actores clave como la ganadería, la agricultura local, la industria de fertilizantes orgánicos y los gestores de residuos. ¿Y cómo está evolucionando su desarrollo tanto en España como en Europa? En España, a pesar del gran potencial de crecimiento, el proceso está siendo lento, en buena parte debido a que los trámites burocráticos son lentos y “En Biovic consideramos el biometano un híbrido entre un proyecto energético y uno agrario, involucrando a actores fundamentales en nuestra economía como la ganadería y la agricultura local” 46 MPRESA E

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