energía limpia más competitiva puede llegar a sobrepasar al conjunto de las fuentes no renovables, como principales fuentes de obtención energética. España es un país pionero en este ámbito, ya que ha implantado un marco normativo sobre los sistemas de hibridación eléctrica. Ya en el año 2020, se consiguió que el Real Decreto-Ley 23/2020 permitiera y regulara las hibridaciones de instalaciones renovables e incluyera también al almacenamiento como otra posible tecnología a ser hibridada. La hibridación también se recoge en el Real Decreto 1183/2020, de acceso y conexión a las redes de transporte y distribución de energía eléctrica y en la Circular 1/2021 de la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia, donde se estableció la metodología y condiciones del acceso y de la conexión a las redes de transporte y distribución de las instalaciones de producción de energía eléctrica. La regulación de esta nueva forma de producción es imprescindible para reconocerla como fuente fiable de obtención de energía, para garantizar su buen funcionamiento y para impulsar más inversión en los parques híbridos. Actualmente, España es una gran ventana de oportunidad de inversión, ya que cuenta con casi 30 GW de parques eólicos instalados. De ellos, una parte muy importante son susceptibles a ser hibridados con paneles fotovoltaicos por las condiciones en las que se encuentran. Gracias a la creciente regulación, es posible que la energía renovable se introduzca más rápidamente sin depender de nuevas licencias. Muchas empresas ya han descubierto los beneficios que reporta la hibridación y están comenzando sus proyectos en este ámbito. Esto crea un precedente para empresas más pequeñas, que poco a poco integrarán este modelo de parques en sus carteras y consolidarán esta práctica como la más popular del momento. En definitiva, la hibridación se presenta como una solución a los retos que atañen las energías limpias en cuanto a eficiencia y costes. Es innegable que se necesita una constante innovación para poder seguir las tendencias del sector y afrontar los desafíos, además de legislar promoviendo la mejora y protección del medioambiente. Si España busca reafirmar su liderazgo en energías renovables, se debe seguir este camino, apostando por la hibridación como una de las formas más eficientes de producción de energía. n La hibridación supone un aumento en la eficiencia en la producción de energía, lo que permite reducir la dependencia de otras fuentes de energía más contaminantes. La combinación de la eólica con otras fuentes de energía garantiza una producción constante y estable de energía, que mejora la estabilidad de la red y reduce los riesgos de apagones y fallos de energía DOSIER EÓLICA 31
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