Al agua permeada que abandona la ósmosis inversa se le adiciona dióxido de carbono y se introduce en lechos de contacto con calcita, donde rompe carga y se remineraliza hasta alcanzar un índice de Langelier neutro según las especificaciones de la ONEAD. Desde el tratamiento de remineralización, el agua una vez ha sido convenientemente clorada, fluye por gravedad hasta el almacenamiento de la misma, en un tanque de regulación de 2.000 m3 de capacidad . La entrega del agua a la ciudad se realiza en el depósito de Farah Had dentro de la ciudad. Para llevar el agua hasta allí, se ha construido una estación de bombeo constituida por 2+1 bombas centrífugas con un caudal unitario de 470 m3/h. La conducción de impulsión hasta el depósito de Farah Had, de 9 kilómetros de longitud, se realizado con tubería enterrada de poliester reforzado con fibra de vidrio (PRFV) de 700 mm de diámetro. El depósito de Farah Had ya existía en la red original, pero, como parte del alcance del contrato de Tedagua - Eiffage, se ha automatizado llevándose el control de forma remota desde la estación de desalación. La salmuera generada en el proceso de ósmosis, así como las aguas de lavado de los filtros, son evacuadas al mar mediante un emisario submarino constituido por una tubería de polietileno de 800 mm de diámetro de 760 metros de longitud, fondeada en el lecho marino y Carbon dioxide is added to the permeate water leaving the reverse osmosis racks. This water is sent to calcite beds, where the pressure is broken and remineralisation takes place to achieve a neutral Langelier Index in accordance with ONEAD specifications. After remineralisation, the water is chlorinated and flows by gravity for storage in a regulation tank with a capacity of 2,000 m3. The water is delivered to the city from the Farah Had tank, which is located within the city. The water is sent to this tank by means of a pumping station equipped with 2+1 standby centrifugal pumps with a unitary flow rate of 470 m3/h. The underground pipeline to the Farah Had tank is 9 km long and is made up of GRP pipes with a diameter of 700 mm. The Farah Had tank already formed part of the original network but it has been automated and is now remotely controlled from the desalination plant, as envisaged in the contract awarded to the Tedagua – Eiffage consortium. The brine produced in the osmosis process is discharged into the sea, along with the filter cleaning water, through a subsea outfall. The outfall comprises a polyethylene pipeline of 760 metres in length and 800 mm in diameter. The pipes are anchored to the seafloor and there are a number of diffusers www.futurenviro.es | Junio-Julio June-July 2021 27
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