FO80 - FuturEnviro

www.futurenviro.es | Mayo-Junio May-June 2021 13 Mujeres y Medio Ambiente | Women & Environment el peso sigue estando en ellas, con un 78% de las mujeres y un 33,7% de los hombres. Si trasladamos estos datos a España, los porcentajes más o menos coinciden: La dedicación al cuidado de los hijos suma un 40% en las mujeres y un 28% en los hombres. En el caso de las tareas domésticas: el 80% de las mujeres y el 28% de los hombres. Este factor, condiciona las oportunidades de las mujeres de forma consciente o inconsciente desde su propia infancia, limitando sus posibilidades y toma de decisiones en su desarrollo tanto personal como profesional. Si bien inicialmente acceden al mercado laboral, muchas de ellas, ya sea por responsabilidad familiar o como resultado de una crisis económica, son las primeras en volver al entorno familiar para su sostenimiento. ¿Debe ser así siempre? Si se quiere avanzar en este concepto de agente de cambio, la corresponsabilidad en el cuidado debe convertirse en un eje de acción transversal real de esta nueva economía verde, y me temo que debe partir desde las propias familias, que es donde se deben producir los cambios culturales necesarios para acomodar esta visión neutra. No veremos los cambios en una sola generación, pero podemos ir asentando las bases con el ejemplo en nuestro entorno diario. Educar a las mujeres desde la infancia en que no hay distinción de género en la elección de su futuro, es otra de las premisas que todavía no hemos conquistado del todo. A pesar de todas las oportunidades que se ofrecen para empoderar a las mujeres, nos olvidamos de que antes de ser eso-mujeres- somos niñas, y solo desde la infancia se nos puede enseñar que podemos desarrollar nuestras ambiciones personales y profesionales en la forma que entendamos conveniente, sin limitación de género. El mismo European Institute for Gender Equality, en su reporte de España para el año 2020, señala ya como una cuestión a mejorar6, la limitación de opciones que caracteriza la elección de estudios superiores por parte de las mujeres. Éstas superan en número a los hombres en los estudios relacionados con la educación, la salud, el bienestar, las ciencias humanas y el arte, pero no en aquellas disciplinas donde la brecha de género es más evidente: Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas (STEM). Para minimizar este efecto, es necesario que las niñas en sus contextos sociales y educacionales cuenten también con role-models femeninos, que les sirvan de ejemplo y referente, ayudándolas a visualizar que pueden conquistar cualquier opción personal y profesional que deseen, si así se lo proponen. Un role-model, podemos serlo cualquiera de nosotras: cualquier mujer que haya luchado por tener un papel activo en la sociedad y que tenga interés en servir como ejemplo para las niñas del futuro. Y aquí destaco el papel de organizaciones como Inspiring Girls España7, Fundación que se ha propuesto esto mismo: Poner en contacto a niñas en edad escolar con mujeres profesionales de todos los sectores, que les sirvan de ejemplo y referente para su futuro. Yo misma participo como voluntaria en esta Fundación, compartiendo mi experiencia con niñas de nueve y diez años, y debo decir que todavía, ese sesgo de género se percibe en conversaciones con las niñas. Si, todavía quedamucho por hacer. Yme parece que gran parte de la solución solo puede empezar en casa. n men cared for children, elderly or disabled persons. In the case of housework, the load continues to fall on women, with 78% of women and 33.7% of men carrying out domestic chores. The percentages for Spain more or less coincide, with 40% of women and 28% of men caring for children, and 80% of women and 28% of men doing housework. This factor conditions women’s opportunities, consciously or unconsciously, from their very childhood, limiting their possibilities and freedom to make decisions in their personal and professional development. Although they initially enter the labour market, many of them, either because of family responsibility or as a result of an economic crisis, are the first to return to the family environment in order to sustain it. Must this always be so? If we wish to advance in terms of the agent of change concept, co-responsibility in care must become a true transversal pillar of action in this new green economy. And this, I am afraid, must begin in families themselves, which is where the necessary cultural changes must take place to accommodate the gender-neutral vision. We will not see the changes in a single generation, but we can lay the foundations by example in our day-to-day environment. Educating women from childhood that there is no gender distinction in the choice of their future is another premise that we have not yet fully assimilated. Despite all the opportunities offered to empower women, we forget that before becoming that - women - we are girls, and only from childhood can we be taught that we can develop our personal and professional ambitions in the way we see fit, without gender limitations. In its report on Spain for the year 2020, the European Institute for Gender Equality highlights, as an area for improvement, the limited range of options that characterise the higher education choices of women6. Women outnumber men in studies related to education, health, wellbeing, humanities and the arts, but not in those disciplines where the gender gap is most evident: Science, Technology, Engineering and Mathematics (STEM). To minimise this effect, it is necessary that girls in their social and educational contexts also have female role-models to serve as examples and references, helping them to visualise that they can take any personal and professional option they wish, if they set their minds to it. Any woman who has fought to play an active role in society and who is interested in serving as an example for the women of the future can act as a role model. And here I would like to highlight the role of organisations such as Inspiring Girls España7, a Foundation which seeks to achieve just this: to put girls of school-age into contact with professional women from all sectors, who can serve as role models and references for their future. I myself participate as a volunteer in this Foundation, sharing my experience with nine- and ten-year-old girls, and I must say that gender bias is still to be perceived in conversations with the girls. Yes, there is still a lot to be done. And it seems to me that much of the solution lies in beginning at home. n But if women are to be recognised as key agents of change in the green transition, let us first discuss some basic premises for their success Pero si la mujer es reconocida como un agente de cambio clave en la transición verde, hablemos primero de algunas premisas básicas para su éxito: La necesidad de neutralizar el género en los cuidados y de educar a las mujeres desde la infancia en que no hay distinción de género en la elección de su futuro 5 https://eige.europa.eu/gender-equality-index/2020/domain/time 6 https://eige.europa.eu/publications/gender-equality-index-2020-spain#downloads-wrapper 7 https://www.inspiring-girls.es/que-somos/

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