En este contexto, el reciclaje de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) se presenta siempre como el gran reto, al tratarse del flujo de residuos que más crece en el mundo -a un ritmo tres veces más rápido que el resto- y además es una herramienta de desarrollo socioeconómico que no podemos dejar escapar. De hecho, el número de dispositivos móviles conectados multiplicará por tres al de habitantes de la Tierra en 2021. Asimismo, es evidente que la rápida industrialización de las economías emergentes ha multiplicado exponencialmente la demanda de recursos lo que ha provocado que muchas materias primas y minerales se hayan encarecido. Ante esta situación, y tal como apuntan organismos como la Fundación Nacional de Ciencias Naturales o el Fondo Nacional de Ciencias Sociales, ambos chinos, extraer de la tierra los minerales para fabricar nuevos dispositivos electrónicos resulta trece veces más caro que obtenerlos a través de la minería urbana, como se conoce a la reutilización de los materiales contenidos en los residuos electrónicos que permite un reciclaje adecuado de los mismos. Medidas para la acción en España Cerrar el círculo de la gestión de los residuos electrónicos supone una oportunidad que no podemos dejar escapar para luchar contra la crisis de recursos naturales que vivimos. En el caso de España, necesitaríamos dos veces y media nuestra superficie para satisfacer adecuadamente los recursos que precisamos. Afortunadamente, en nuestro país cada vez somos más los agentes sociales que, como los sistemas colectivos, trasladamos hasta los ciudadanos la necesidad de tomar conciencia de esta situación y las acciones que pueden llevar a cabo para contribuir a un entorno más sostenible. Pero la predisposición de éstos últimos no es suficiente si no va acompañada de las políticas medioambientales adecuadas. En este sentido, 2019 ha traído buenas noticias. En concreto, el Ministerio para la Transición Ecológica (MITECO) ha confirmado la tan necesaria revisión del Real Decreto de 2015 que regula la gestión ambiental de los residuos electrónicos en nuestro país, para incorporar las medidas del paquete de Economía Circular de la UE. Se trata de una revisión fundamental para no echar a perder una normativa pionera en Europa por incluir unos objetivos ambiciosos de reutilización, pero que precisa una actualización para mejorar cuestiones como la trazabilidad desde la recogida del residuo hasta su tratamiento. En definitiva, despedimos un año paradójico, y es que no deja de serlo que cada vez más ciudadanos y empresas no conciban su bienestar sin el gesto de depositar, por ejemplo, sus aparatos en desuso en los contenedores adecuados, frente a la falta de coraje de instituciones y gobiernos para actuar con decisión y ambición frente a la catástrofe, crisis o emergencia climática, llámelo usted como quiera. Science Fund of China point to the fact that extracting minerals for the manufacture of new electronic devices is three times more expensive than obtaining these minerals though urban mining, the name given to the concept of reusing the materials contained in electronic waste, thereby enabling them to be recycled appropriately. Measures for action in Spain Closing the electronic waste management loop in Spain represents a great opportunity that must be availed of to fight against the current natural resources crisis. Spain would need a surface area of two and a half times larger to satisfy our demand for resources. Fortunately, an increasing number of social agents in our country, including the collective waste management systems, are providing information to citizens on the need to be aware of this situation and the actions they can take to contribute to a more sustainable environment. But the predisposition of citizens is insufficient if it is not accompanied by adequate environmental policies. In this respect, 2019 brought good news. The Spanish Ministry for Ecological Transition (MITECO) confirmed the very necessary review of the 2015 Royal Decree governing the environmental management of electronic waste. The review, which will incorporate the actions outlined in the EU Circular Economy Package, is of vital importance in order to implement legislation that is pioneering in Europe because of the inclusion of ambitious reuse targets. However, this legislation needs to be updated in order to improve areas such as traceability from waste collection through to treatment. Ultimately, we have bid farewell to a paradoxical year in which an increasing number of citizens and businesses cannot conceive their wellbeing without depositing their used electronic equipment, to cite an example, in the specified containers. This contrasts with the lack of courage of institutions and governments to act decisively and ambitiously to combat the climate catastrophe, crisis or emergency, depending on what you prefer to call it. The Spanish Ministry for Ecological Transition (MITECO) confirmed the very necessary review of the 2015 Royal Decree governing the environmental management of electronic waste. The review, which will incorporate the actions outlined in the EU Circular Economy Package. El Ministerio para la Transición Ecológica (MITECO) ha confirmado la tan necesaria revisión del Real Decreto de 2015 que regula la gestión ambiental de los residuos electrónicos en nuestro país, para incorporar las medidas del paquete de Economía Circular de la UE. A fondo: Análisis 2019 | In depth: Analysis of 2019 FuturEnviro | Diciembre 2019-Enero 2020 December 2019-January 2020 www.futurenviro.es 49
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